La presidenta del Consell, Susana Mora, confirmó ayer que no podrá concluir la revisión del Plan Territorial Insular y que, en contra de lo que hace tres semanas anunció el gobierno formado por PSOE, Més y Podemos, ya no será aprobado inicialmente en el último pleno de este mandato, que se celebrará el 20 de mayo.
Esta relevante decisión política, que implica el incumplimiento de uno de los principales compromisos de la izquierda firmados en junio del 2015, se conoce después de haber advertido el PP-Menorca que «las importantes deficiencias del PTI impedirán su aprobación en esta legislatura», pero sostiene la presidenta y candidata Mora que ha aplazado la revisión del plan por «responsabilidad y calidad democrática».
Con este retraso la revisión del principal instrumento de planeamiento y ordenación territorial queda aplazada al próximo mandato. No era prudente ni aconsejable forzar la aprobación del Plan Territorial a sólo seis días de las elecciones en las que los menorquines votarán la nueva corporación insular. No se ha cumplido este objetivo, lo que aumenta la exigencia para alcanzar un mayor acuerdo social y político durante el próximo mandato.