Desde hace quince días Balears aguarda la autorización del Ministerio de Sanidad para el plan piloto de ‘turismo seguro' que debe permitir la llegada a las Islas, en la segunda quincena de junio, de 6.000 turistas alemanes: 4.000 a Mallorca, 1.000 a Menorca y otros 1.000 a Eivissa y Formentera. Según la ministra de Turismo, Reyes Maroto, estos visitantes deberán rellenar un formulario al aterrizar para estar localizados durante su estancia vacacional en Balears, y también se les tomará la temperatura en los aeropuertos, medidas de control para evitar nuevos contagios de la covid-19. Pero los hoteleros ya han advertido que esta prueba piloto no será viable si no es autorizada de forma inmediata.
La presidenta del Govern, Francina Armengol, aseguró ayer que esperan recibir hoy una respuesta definitiva para que el plan pueda arrancar el 15 de junio. El planteamiento inicial consistía en que los primeros turistas que lleguen a Balears serían sometidos en los aeropuertos a pruebas PCR para detectar si son portadores del coronavirus; y deberían permanecer aislados seis horas en sus hoteles hasta obtener el resultado de estos análisis. El Gobierno de Pedro Sánchez ya no puede demorar más su respuesta, porque tanto el Govern como el sector han de saber a qué atenerse. Es preciso acabar con esta inexplicable incertidumbre.