La interrupción de la actividad social y económica por las medidas para evitar la propagación de la pandemia -estado de alarma y confinamiento- sigue teniendo efectos sobre el mercado laboral de Menorca. Dos de cada diez trabajadores que en abril del año pasado fueron incluido en ERTEs siguen en esta situación cuando ya han transcurrido trece meses. Son 1.657 personas que aguardan la reactivación para reincorporarse a su puesto de trabajo. El acuerdo alcanzado in extremis por el Gobierno con los agentes sociales permitirá prorrogar hasta el 30 de septiembre estos expedientes, pero lo realmente importante consiste en la recuperación de la economía porque el año pasado -cuando aún no había empezado la vacunación- se truncó la temporada con los rebrotes y los contagios.
A la espera de la decisión que el 7 de junio adoptará el Reino Unido sobre la calificación de los destinos turísticos para saber si Balears es calificada con semáforo verde, TUI vuelve a retrasar el inicio de los vuelos de Gran Bretaña al 14 de junio. Mientras, la vacunación se ralentiza cuando constituye una prioridad agilizar la inmunización de la población. Así lograremos ser un destino seguro.