La Conselleria d’Educació topa con crecientes dificultades para cubrir las especialidades docentes, como confirma que en el último concurso oposición celebrado en Balears quedasen desiertas 21 plazas. Una realidad que preocupa en el departamento que dirige el conseller Antoni Vera: la profesión docente atrae cada vez a menos personas. De las 21 especialidades que han quedado desiertas, dos corresponden a Mallorca; cuatro a Menorca; cinco a Formentera y una decena a la isla de Eivissa. El conseller Vera advierte que «nos enfrentamos a un reto importante que requiere la adopción de medidas». Propone «un debate serio y constructivo» porque esta problemática podría agravarse en los próximos años.
Vera es consciente de que es preciso buscar soluciones para garantizar la dotación de docentes en los centros educativos de las Islas, sea cual sea su ubicación o especialidad. El pago de complementos económicos para cubrir plazas de difícil y muy difícil cobertura en Menorca y Pitiüses fue un primer paso y ha servido para completar estas plantillas, pero el problema persiste. La falta de recursos en los centros, la diversidad en las aulas y el trato con las familias desincentiva el interés por esta profesión entre los jóvenes. La Conselleria ha de liderar el análisis con el sector educativo para hallar las soluciones y aplicarlas.