La presidenta del Govern, Marga Prohens, anunció ayer por sorpresa la remodelación del Ejecutivo autonómico, con la salida de la histórica consellera Catalina Cirer, responsable hasta la fecha de Asuntos Sociales, a la que sustituirá Sandra Fernández, secretaria general del PP balear; el nombramiento de Catalina Cabrer como nueva consellera de Trabajo y la creación de una segunda vicepresidencia, con Antònia Estarellas al frente. Según Prohens, estos cambios servirán para «reforzar la coordinación interna del Govern». Especialmente cariñosa se mostró la presidenta con Catalina Cirer, «una mujer querida como pocas en la política en las Islas».
El nuevo equipo tiene un perfil más político y llega al día siguiente de la aprobación de los presupuestos para este año, una decisión de gran trascendencia al allanar la segunda parte de la legislatura. El objetivo de Prohens es revalidar la victoria que logró en mayo de 2023 y aprovechar la grave crisis del PSOE por el triple caso Koldo/Ábalos/Santos. Antònia Estarellas se convierte en una de las conselleras de mayor peso en el Govern al asumir, entre otros asuntos, todo lo relacionado con inmigración, cuando esta problemática había tensado las relaciones entre el PP y sus socios de Vox. Prohens marca perfil propio, y refuerza su autoridad y liderazgo frente al Govern y el PP balear.