Las estadísticas sobre la siniestralidad en las carreteras confirman que los motoristas, junto con los peatones, son los más vulnerables en caso de colisión. Las víctimas mortales y las lesiones graves e irreversibles así lo confirman. Hay un dato muy inquietante, relativo a los conductores que circulan mientras envían whatsapps, lo que está totalmente prohibido. La Guardia Civil de Tráfico y las policías locales de Balears han detectado que este comportamiento va a más y que las multas que se imponen no reducen estas infracciones gravísimas que ponen en riesgo la vida de los conductores y de otras personas. Sin embargo, este repunte de la siniestralidad no se puede achacar únicamente a que en julio y agosto el número de turistas se multiplica.
El incremento de visitantes provoca más accidentes. Entre las causas más frecuentes de los siniestros se encuentra el exceso de velocidad, no respetar las señales de tráfico y que cada son más los conductores que circulan bajo los efectos de estupefacientes o del alcohol. También crece el número de implicados en accidentes que huyen porque, precisamente, están drogados o bebidos. La Justicia debería tener más mano dura con ellos.