El puerto de Maó acogerá en agosto la séptima edición de la última regata del circuito de la Copa del Rey de Barcos de Época-Clásicos Trofeo Panerai. Se espera una participación récord, con unos setenta barcos de diez países distintos. El año pasado se suspendió esta regata, en el momento de la transición de los amarres que gestionaba el Club Marítimo y que Autoridad Portuaria adjudicó a Trapsa Yates. Ahora se recupera la organización, por parte del club mahonés y del Club Nàutic de Barcelona, una noticia que merece ser destacada.
La regata no es sólo un acontecimiento deportivo. Tiene especial importancia por su incidencia económica en la actividad del puerto de Maó, una zona que precisa de este tipo de acciones. Además, la presencia de unos setenta barcos clásicos y de época navegando por aguas menorquines es una de las mejores promociones turísticas que se puede ofrecer. La repercusión en publicidad fuera de la Isla es un elemento que debe valorarse. Por estos motivos, las instituciones y la sociedad menorquina deben darle valor a las iniciativas como la del Club Marítimo que permiten atraer actividades de gran trascendencia para la economía local y para la promoción turística de Menorca.