La portavoz del Govern, Joana Barceló, lo dejaba claro en unas declaraciones recogidas en nuestra edición del domingo: el turismo es el sector que está impulsando la recuperación económica en Balears. Sin embargo, advertía que nuestra Isla llevaba cierto retraso respecto a Mallorca y Eivissa. Por este motivo, toda iniciativa empresarial que contribuya a crear riqueza ha de ser bienvenida y apoyada desde la Administración, dando por supuesto que ha de ajustarse al marco legal de la Reserva de la Biosfera. En este contexto, se ha de enmarcar la histórica demanda del sector de las golondrinas de Ciutadella de poder amarrar sus embarcaciones en la costa norte, igual que se hace en el litoral sur. Las excursiones marítimas son ciertamente un producto atractivo para los turistas y tienen un potencial de crecimiento si se amplía su radio de acción, como lo demuestran las cifras de pasajeros (75.000 en 2009). No obstante, la respuesta a la petición del sector náutico debe ajustarse a las exigencias que impidan riesgos para el equilibrio medioambiental. También se han de garantizar infraestructuras integradas en el entorno y evitar masificaciones que alteren la tranquilidad de estas zonas de baño.
Editorial
Excursiones compatibles con el entorno natural