El estado de emergencia que ha declarado el Gobierno para justificar los Presupuestos Generales del Estado de 2012 no explican los motivos del recorte que se ha aplicado a Balears, reduciendo las aportaciones en un 56,6 por ciento, incumpliendo el Estatut, aprobado como Ley Orgánica, y dejando a los residentes en las Islas en una situación de injusta inferioridad. El Govern de José Ramón Bauzá pueden entender los motivos de la austeridad, que él mismo está aplicando, pero no puede aceptar la desigualdad, ni que nuestra Comunidad Autónoma siga manteniendo una diferencia injustificable respecto de la financiación de la mayoría de las autonomías. Ni tan solo percibe el 3 por ciento que le correspondería de los 11.115 millones que el Estado destina a las comunidades autónomas, con un recorte de 190 millones de los fondos estatutarios y suspendiendo los convenios de carreteras. Además la reducción de la subvención al transporte aéreo es superior en el caso de nuestras islas y alcanza el 25 por ciento, a lo que se añade un incremento de las tasas del 19 por ciento. Los datos cuestionan la credibilidad de las promesas sobre el descuento de residente. Ante esta situación, los responsables políticos de Balears y de Menorca deben reclamar un mejor trato, el que se merece esta tierra.
Editorial
Los presupuestos castigan a Balears