Tiene el PP los médicos, los jueces, alguna asociación de víctimas y, como no podía ser de otra manera en un asunto como el caso "Bolinaga", Mayor Oreja un trajín de dimes y diretes, de inseguridades y opiniones encontradas, que si no fuera por lo serias que son estas cosas, pensaríamos que estamos ante un sainete digno de los Álvarez Quintero.
Mayor Oreja se erigió a sí mismo, como oráculo infalible en asuntos de traiciones etarras aquél día en que se le ocurrió decir lo de la trampa de ETA sobre una de sus treguas.
Sin duda debe ser cierto que un hombre ilustrado y paciente, se recuperará de un fracaso, mientras que otro mediocre, además de engreído de sí mismo, jamás se recuperará de un éxito.
En mi opinión, la mala memoria le juega a Mayor Oreja malas pasadas. Con la misma ley que ahora los jueces pueden excarcelar a Bolinaga, Mayor Oreja, según publicada "El País", día 24 de agosto último, excarceló a 18 etarras.
El actual ministro del Interior, Jorge Fernández, visiblemente contrariado por la actitud de Jaime Mayor Oreja, entre otras cosas ha dicho: "El reglamento que se ha aplicado es del 2000. Precisamente de cuando Mayor Oreja era ministro del Interior. Fue elaborado por Mayor Oreja como ministro". Y añadió el ministro Fernández, demoledor: "Se han concedido 23 libertades condicionales de presos enfermos y 18 de ellas fueron concedidas entre 1996 y 2000, mientras ocupaba el cargo Mayor Oreja". Debo añadir además, que un gran número de presos etarras fueron acercados a cárceles vascas. Recién llegado al gobierno, Aznar, acercó 32 presos etarras a cárceles vascas. Durante la tregua 1998-99, acercaría a otros 135 presos. 180 etarras fueron excarcelados. Conviene recordar que uno de aquellos presos liberados, Ignacio Bilbao, asesinaría más tarde a un concejal. En 1.999 el ministro Mayor Oreja informaba de un plan para que regresaran a España 304 etarras, garantizándoles que no tenían nada que temer.
Señor Mayor Oreja, hágame caso y para no hacer más el ridículo, dese usted una vuelta por las hemerotecas y recupérese a sí mismo, que anda usted una miaja trastabillado con la historia, debe de ser por culpa de la memoria, que a tenor de lo que hizo y lo que ahora lleva algún tiempo diciendo, está resultando ser usted, un pertinaz espíritu de la contradicción. Muy feo… pero que muy feo, señor Mayor, cuando esas contradicciones son más que nada sobre sí mismo.
Cuando hizo usted de oráculo, uno más entre los varios que también vaticinábamos que aquella tregua no era otra cosa que una trampa, el acierto y luego sus contradicciones, le incapacitan a usted para los restos, en esa cuestión de tener y poner de acuerdo, una opinión veraz, meditada y culturalmente fiable sobre el problema etarra, su propio partido y su biografía personal.
Por otra parte, como las hemerotecas es lo que tienen, déjeme que le diga que solo existe un documento que trate a ETA de "Movimiento de Liberación vasco" ¿Recuerda usted, señor Mayor Oreja, quién dijo esto?
Por casos aparecidos como el actual, en la pasada Legislatura se organizaban manifestaciones aprovechando la ocasión para que la prensa afín, pusiera a Zapatero y a su gobierno "a caer de un burro". Y ahí estaban abriendo la comitiva callejera, lo más florido y representativo del PP. No tengo cuerpo para imaginarme ahora una de aquellas interesadas manifestaciones, orquestada por intereses partidistas. Ya sería de carcajada, ver camino de la Puerta del Sol, una manifestación contra el actual gobierno por pretender excarcelar a Josu Uribetxeberría Bolinaga, encabezada por Esperanza Aguirre, flanqueada ésta por Jaime Mayor Oreja por un lado y por el otro al señor Aznar, con dos metros de bufanda colgándole hasta las canillas. Esperemos, solo sea por ahorrarnos un esperpéntico espectáculo, que a nadie del PP o de las víctimas, se le ocurra también ahora, organizar tal evento.