En la última semana ha estallado públicamente el conflicto entre los agentes de la Policía Local de Ciutadella y el equipo de gobierno del PP. Aunque los argumentos se desvíen, la causa del enfrentamiento se centra en los recortes que ha aplicado el Ayuntamiento en materia de vacaciones y la prolongación de media hora de servicio, lo que afecta al plus que antes cobraban por exceso de horario. Es evidente que los agentes pierden ingresos, como también lo es que sus sueldos son considerables y que en este momento de austeridad los trabajadores públicos no pueden exigir un trato distinto del que se aplica en las empresas privadas. De todas formas el acuerdo es muy importante y no va a ser posible en este clima de confrontación. La concejala de Policía se equivocó al exigir la imposición de multas después de que ella fuera multada. También debería averiguarse si el agente que la multó realmente no sancionó a otros vehículos, es decir si actuó con la intención de provocar a la edil. La imagen de la Policía Local se deteriora en exceso con este conflicto y seguramente la calidad del servicio también se resiente. En este momento, se impone la negociación, con la generosidad necesaria para llegar a acuerdos.
Editorial
La polémica perjudica a la Policía de Ciutadella