El Parlament de Catalunya ha aprobado una resolución para solicitar a Madrid la declaración de una Obligación de Servicio Público en la ruta Barcelona-Menorca, la de mayor importancia en este momento de todas nuestras comunicaciones aéreas. En las instituciones menorquinas y baleares no se ha adoptado una decisión similar. Conviene comprender el alcance del acuerdo unánime del Parlament. Es un apoyo explícito a la reivindicación que llega desde Menorca, a través de la Plataforma ciudadana, que tuvo la iniciativa de implicar a todos los partidos catalanes. Por otra parte, abre la problemática a una visión que sí se empieza a promover desde Menorca, la idea de una tarifa plana que permita viajar a los no residentes con un precio más asequible, como una forma básica para impulsar el turismo. Catalunya es un mercado de gran importancia para la economía insular, el que de una forma natural y sin grandes esfuerzos promocionales ha respondido siempre. Si esta cuestión permite una colaboración para mejorar la conectividad conviene aprovecharla. Si de esta forma se consigue una mayor demanda de turistas catalanes y durante más meses al año o fines de semana, la economía sale ganando y las tarifas aéreas bajarán.
Editorial
Catalunya también, con el transporte aéreo