En la enseñanza Secundaria y en concreto en los cursos de 3º y 4º de ESO ya se da un buen nivel de inglés, hasta tal punto que podrían los alumnos hablarlo a la perfección con 1.000 palabras aprendidas y con más de 100 verbos irregulares. Sin embargo, la mayoría de alumnos termina el 3º de ESO sin tener un mínimo nivel que le permita expresarse correctamente en inglés.
Mi hija tiene ahora 35 años y aprendió inglés a la edad de 17, porque reaccioné a tiempo al ver que en el Instituto no lo iba a aprender. En una reunión con la tutora del Instituto le pregunté el porqué se exigía hablar y escribir a la perfección el catalán, con lo cual estoy de acuerdo al vivir en Cataluña, y sin embargo en castellano no es así, pues hacen muchas faltas de ortografía, y con respecto al inglés el método aplicado no es el correcto pues dan mucha gramática cuando deberían aprender a hablarlo e ir poco a poco introduciendo la gramática, con el fin de que el alumno pudiese expresarse en inglés en menos de tres años de estudio. es decir, antes del 2º de Bachillerato. Dio la casualidad que la tutora aquel día era la profesora de inglés y encogió los hombros dándome la razón.
Al terminar el Bachillerato la mayoría de alumnos no dominan el inglés y no saben hacer una redacción en castellano sin faltas de ortografía .
Cuando terminan los estudios universitarios siguen igual, es decir, sin dominar el inglés.
A los universitarios que han sacado buenas notas les digo que tienen una buena tarjeta de presentación, pero la segunda tarjeta y eliminatoria será cuando les pregunten cuántos idiomas dominan, pues como mínimo han de saber a la perfección el inglés, o de lo contrario otro universitario con peores notas, pero sabiendo idiomas, les quitará el puesto .
Hace 40 años ya se exigía el inglés en muchas empresas o como mínimo la empresa nos ponía un profesor entre varios alumnos para que lo aprendiéramos de inmediato y lo curioso es que pocos tenían éxito.
Muchos profesionales llevan toda su vida estudiando inglés sin superarlo debido a que utilizan un mal sistema, como puede ser dejarlo por temporadas por exceso de trabajo o por aburrimiento.