El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez ha anunciado un decreto para eliminar las «barreras y los cuellos de botella legales», en explícita alusión a las trabas burocráticas de las administraciones. El objetivo de estas modificaciones, cuyo alcance aún no se conoce, consiste en una mayor agilidad y eficiencia en la gestión de los 140.000 millones de fondos de la Unión Europea que España recibirá para impulsar la reconstrucción por la pandemia. España no puede demorar el envío de sus proyectos a la UE para obtener una financiación extraordinaria que necesita para afrontar la crisis del coronavirus.
Dice Sánchez que por primera vez se suprimen trabas burocráticas en la Administración General del Estado y, al mismo tiempo, recomienda a las autonomías y los ayuntamientos que apliquen medidas similares. El anuncio de estos cambios en las administraciones reconoce el laberinto de leyes, normas, reglamentos y ordenanzas, así como el pesado funcionamiento de la maquinaria oficial, que retrasan y dificultan la gestión y las resoluciones en las instituciones. La UE apremia y exige una agilidad que deberá garantizar la transparencia, la publicidad y la concurrencia empresarial.