Se nos fue el verano! O al menos eso parece. El día gris (jueves 12) y lluvioso; con un viento fresco, así lo quiere demostrar. Se me ha hecho corto este verano, bueno siempre es corto para mí, excepto los días que la humedad y las altas temperaturas me hacen desear un poco de tramontana. El invierno por el contrario, siempre me resulta laaaargo; no tanto por el frío, como por la falta de luz solar; así es que llegados a ese punto, lo que procuro es prepararme mental y físicamente para una especie de hibernación, que no consiste en no salir de casa, sino todo lo contrario. Lo que hago es procurar apuntarme a talleres, u otras cosas que me obliguen a salir cada día. Quedarme en casa me deprime, yo necesito estar activa, relacionarme, caminar, dejar que el aire despeje mi mente, bailar, etc.
Este año se me ha ocurrido ponerme a estudiar algo de Alemán, veré dónde puedo hacerlo; puedo entenderme en inglés y francés, pero en alemán, como que no. En el 2023 estuve en Zurich y Viena, y allí todos te hablan en alemán, me fastidió bastante no entenderme con los nativos, menos mal que mi hijo mayor lo habla casi perfecto. Pero no me atrevía a ir sola por la calle, al menos no los primeros días. Así que me he propuesto que si vuelvo por Suiza, he de poder «apañarme» un poco en su idioma.
Seguiré jugando a truc, al menos una tarde a la semana; voy a probar qué tal me va el yoga en silla que se hace ahora para «personas mayores»... y como este año me he dado cuenta que ya soy mayor...
Por supuesto, al menos un día de baile y una hora de caminar cada día, espero; de vez en cuando sentarme frente al ordenador... y a ver qué sale; es mi forma de conectar con todos/as mis lectores/as.