No me refiero a lo que están pensando. Muchas cosas las elegimos sin tiempo para pensar. Y esas elecciones nos pueden costar caras. Es bueno reflexionar antes de elegir, pues hacerlo conlleva una responsabilidad y después habrá que asumir las consecuencias. Es como una bomba de relojería, que explotará tarde o temprano. Puede ser una explosión de alegría o dolorosa, eso lo comprobaremos con el paso del tiempo.
En determinadas situaciones, es mejor anticiparse y no dejarlo todo para el último momento. No sé si saben lo que es procrastinar. Significa posponer algo por miedo a afrontarlo o por simple pereza.
En estos tiempos en los que nos controlan a través de máquinas y artilugios de todo tipo, la propaganda pretende forzarnos a optar por cosas innecesarias o interesadas. Pensemos antes de actuar o comprar algo.
La mala educación provoca una cascada de decisiones equivocadas o peligrosas. Por eso, el tema educativo es una cuestión social. Las pifias no solo afectan al individuo, sino que repercuten en la colectividad. Si no anticipamos los problemas, las soluciones llegan tarde.
Las elecciones pueden ser anticipadas y pasar desapercibidas. No les damos importancia. Algún día tendremos que cargar con ellas y nos arrepentiremos de haber actuado a la ligera o nos sentiremos orgullosos de lo conseguido, sabiendo que hemos acertado. No elegir por miedo a equivocarse resulta una decisión nefasta.