QUE un turista de Sevilla se queje de que en un bar de Maó le hayan cobrado seis euros por un tinto de verano, que se elabora con vino y gaseosa, un precio que no constaba en la carta, ni en el QR del establecimiento. Opina que «abusos» como este generan malas experiencias de las vacaciones en la Isla. En la imagen se ve que le cobraron 40,80 euros por dos hamburguesas, unas patatas, dos cañas, un agua, un café y el tinto de verano.
QUE el portavoz del PP en la comisión de control del IB3 del Parlament, Antoni Fuster, se quejara ayer del frío en la sala, en plena ola de calor, debido a la potencia del aire acondicionado.
QUE el propietario de una moto pidiera el miércoles cita para pasar la revisión en la ITV de Ciutadella y se la dieran para el 20 de agosto, advirtiéndole que, mientras espera, le pueden multar.
QUE algunos pasajeros no comprendan que en el Aeropuerto de Menorca se vendan ensaimadas hechas en Mallorca, de las que se llaman mallorquinas, como un recuerdo de las vacaciones.