El vocalista de «Babyshambles», Peter Doherty, fue acusado hoy de posesión de cocaína en el contexto de una investigación sobre la muerte en enero por aparente sobredosis de una rica heredera británica, Robin Whitehead, con quien el músico supuestamente coincidió en una fiesta.
Doherty fue informado de la imputación -de estar en posesión de esa droga de clase A entre el 21 y el 25 de enero de este año- al personarse en una comisaría londinense en cumplimiento de las condiciones de su libertad condicional, según informó la agencia local PA.
El cantante, de 31 años, fue una de cuatro personas detenidas -entre ellas dos amigos suyos- justo después de la muerte el 24 de enero de Whitehead, una cineasta de 27 años y miembro de la poderosa dinastía Goldsmith en el Reino Unido.
Se supone que todos habían asistido a una fiesta la noche anterior en un piso del barrio de Hackney, en el este de Londres.
Los dos amigos de Doherty también han sido acusados: Peter Wolfe, de 42 años y que se alojó en el piso donde murió Whitehead, ha sido imputado por tráfico y posesión de cocaína, mientras que el también músico Alan Wass, de 29, afronta un cargo de posesión.
Una mujer de 53 años detenida bajo sospecha de obstrucción de la justicia ha sido puesta en libertad sin cargos.
Whitehead, que se hacía llamar Robyn, pasó los últimos diez días de su vida rodando un documental sobre Doherty, quien es conocido, además de por su música y una antigua relación con la modelo Kate Moss, por sus problemas con las drogas.
Con el título «El camino a Albión», la película se centraba en la etapa del músico con los «Libertines».
Peter Doherty, quien expresó su «conmoción y tristeza» tras la muerte de la joven, ya fue interrogado el pasado marzo por presunto suministro de drogas.
El músico deberá comparecer junto con los otros dos acusados ante un tribunal londinense el próximo 18 de octubre.