La hija de Kurt Cobain, Frances Bean Cobain, ha asegurado que no le gusta demasiado la música del grupo de su padre, Nirvana, y que prefiere la de otras bandas como Oasis, Mercury Rev o Brian Jonestown Massacre.
«No me gusta demasiado Nirvana. Lo siento, gente que se dedica a la promoción en Universal Music. Estoy más en Mercury Rev, Oasis o Brian Jonestown Massacre. No estoy interesada en la escena grunge, aunque Territorial Pissings (de Nirvana) es una gran canción», ha declarado a Rolling Stone.
En esta línea, ha añadido que llora cada vez que escucha Dumb, otra de las canciones de su padre. «Es una desnuda versión de la percepción que Kurt tenía de sí mismo. De sí mismo con drogas y sin drogas, sintiéndose inadecuado para ser llamado la voz de una generación», ha añadido.
Frances ha señalado que tenía unos 15 años cuando comprendió la magnitud de la figura de su padre: «Incluso si estaba en un coche y ponía la radio, ahí estaba él. El es más duradero que la vida, y nuestra cultura está obsesionada con los músicos muertos, nos encanta ponerles en un pedestal».
«Si él hubiera sido solo otro tipo que abandonó a su familia de la manera más dolorosa posible... pero no lo fue. El inspiró a la gente que ahora le pone en un pedestal, para convertirle en San Kurt», ha reflexionado.
Estas declaraciones llegan con motivo de Montage of Heck, el primer documental oficial y autorizado por la familia sobre Kurt Cobain, que se estrenará en los cines españoles el próximo 23 de abril, con la promesa de ofrecer una visión íntima y personal del líder de Nirvana, fallecido en abril de 1994.