«Ha dicho que sí». Así anunciaba Gareth Bale, jugador del Real Madrid, que su novia, Emma Rhys-Jones, había aceptado su proposición de matrimonio.
El centrocampista, que este sábado celebraba su 27 cumpleaños rodeado de familia y amigos en Tagomago, aprovechó la ocasión para pedirle matrimonio a su novia, la madre de sus dos hijas, quien no dudo en contestar que sí. El futbolista había alquilado la isla, propiedad de Matthias Kühn, por medio millón de euros.
Por este motivo, para Gareth Bale será un «fin de semana de cumpleaños que no olvidaré en mucho tiempo».