Fue un momento muy breve pero que se ha comentado mucho entre los telespectadores que siguieron este domingo la final de la Eurocopa, y también en redes. Y es que la infanta Sofía protagonizó una escena un tanto tensa con su padre, el rey Felipe VI, en plena celebración del triunfo de La Roja. Habían pasado aún pocos minutos desde que el árbitro pitara el final del partido, dando la cuarta Eurocopa a la selección. El estadio y toda España saltaba de alegría. Después de repartir las medallas uno a uno a los jugadores, y de que estos alzaran la recién y tan esperada copa de Europa, miembros del equipo de la selección y algunos representantes se unieron a los vítores y saltos en el campo, entre ellos, ni más ni menos que el rey Felipe y la infanta Sofía. Y aquí ocurrió la escena que todos sentimos un tanto incómoda.
Y es que el capitán del equipo, Morata, ofreció la copa al rey Felipe y este, en un alarde de querer compartir semejante momento tan especial y alegre con su hija -quien, se sabe, es fan de la selección-, le ofreció el trofeo para que fuera ella quien lo alzara. Sin embargo...a Sofía esto no le hizo mucha gracia.
Aunque no oímos la conversación, sí pudimos ver cómo la infanta rechazó en varias ocasiones coger el trofeo, ante la insistencia reiterada de su padre. Finalmente, ante la negativa rotunda de Sofía, fue el propio Felipe VI quien alzó le trofeo ante la Roja.
Hay quienes critican la timidez de la infanta, pero cabe recordar que se trata de una adolescente de 17 años, que quizá se vio rodeada de hombres extremadamente eufóricos, en un momento televisivo de máxima audiencia mundial y quién sabe si la vergüenza o la prudencia la frenaron. Aún así, pasado este momento 'tierra trágame', se la vio recuperar la sonrisa enseguida y seguir disfrutando, como visiblemente lo hizo hasta entonces, de la victoria de un equipo que ha unido al país como nunca nadie desde hacía ya mucho tiempo.