La noticia sobre la venta de la vivienda familiar de los Obregón en Mallorca rápidamente saltó a los medios. El pasado 30 de agosto, la presentadora de televisión habría negociado la venta de la mansión 'El Manantial' con una inmobiliaria de lujo. Sin embargo, en ese momento, ningún miembro de la familia habló del tema. Hasta ahora, se conocía que la casa, ubicada en la Costa de los Pinos, se encontraba en el portal de venta por una cifra de 35 millones de euros.
Los rumores apuntaba que Javier García Obregón, el hermano de Ana, era el encargado de la gestión de la propiedad. Sin embargo, cuando el miembro de la familia Obregón ha sido abordado en la calle por un periodista del corazón, ha declarado que «es un tema confidencial» y ha rehusado a hacer comentarios sobre la venta de la casa de lujo. Posteriormente, en cuanto el reportero le pregunta por los motivos que les han llevado a esta acción, Obregón acaba por decir «es que no se vende».
La incógnita de la transacción se encuentra ahora en el aire. Tras salir publicado en los medios de comunicación, la inmobiliaria de lujo ha retirado el precio del anuncio en su página web. Por su parte, Ana Obregón continúa publicando imágenes de su posado de verano en su cuenta de Instagram. En esta exclusiva que concedió a ¡Hola!, la presentadora comparte los rincones de su hogar en la Isla acompañada de su nieta. «Y llegó septiembre coleccionando momentos con mi angelito entre pinos, mar, purés y tu infinita ausencia», escribe Obregón en el pie de foto.
La casa fue construida en los años 70 por Antonio García, el padre de la actriz, y cuenta con un terreno de más de 8.000 metros cuadrados, de los cuales la vivienda ocupa aproximadamente 1.000 metros cuadrados. «Cuando llegamos aquí éramos apenas unos veinte, además del Eurotel. Descubrí la Costa de los Pinos a través de un primo hispano-inglés de Ana», contó el padre de la familia en una entrevista concedida a este medio en 2013. Tras el fallecimiento de su hijo, Aless Lequio, este lugar se convertiría en el refugio emocional de Ana.
En concreto, la propiedad, que según la propia Ana es un «paraíso en la tierra», cuenta con siete habitaciones con baños en suite, un salón comedor con terraza, zona de día, zona de noche, sala de plancha y una cocina de gran tamaño. Además, entre sus exclusivos servicios, también tiene un pozo privado de agua potable, un manantial y un punto de atraque en el embarcadero. Este ha sido el hogar de la familia y tiene un gran valor sentimental, ya que ha sido el escenario de sus veranos cuando estaban todos. En los últimos años, la presentadora ha sufrido la pérdida de sus padres y su hijo.