Tras años de experiencia, a Andreu Buenafuente le pasó algo insólito en su programa Late Motiv, que le enviaran la entrevista ya hecha para que se la hiciera a su próximo invitado, el psicólogo y escrito Rafael Santandreu.
Ante esta situación, el presentador explicó en directo su sorpresa y le pidió explicaciones a su invitado, dejándolo en ridículo.
Rafael Santandreu acudía al programa para presentar su libro Ser Feliz en Alaska. Buenafuente empezó la entrevista con estas palabras: «Lo que me sucedió antes de tu entrevista, no me había sucedido nunca en toda mi carrera profesional». «Nunca antes nadie me habían mandado toda la entrevista hecha, con sus preguntas y sus respuestas».
El presentador mostró el formulario que recibió por parte del invitado y le emplazó a «estoy deseando que me digas por qué lo hiciste».
El entrevistado contestó: «¿Sabes por qué es? Lo hacemos porque los periodistas hacen muy malas entrevistas. A veces hacen unas preguntas que uno no quiere responder. Mi pasado de profesor universitario me lleva a darles las preguntas y las respuestas».
«¿Sabes lo que va a pasar?», respondió Andreu. «No la vamos a usar. La vamos a tener aquí, por si acaso... Imagina que cada invitado trae la entrevista hecha, me sustituyen por una máquina, y me quedo sin trabajo. Ya no sería feliz ... Y compraría tu libro. ¡Ah! Todo era un plan», bromeó el presentador.
Pese al ridículo de los primeros minutos de entrevista, en los siguiente quince minutos todo continuó como siempre, con humor, preguntas inteligentes y sobre todo, nada de tensión entre ninguna de las partes.