Una de las eternas disputas en el mundo de la nutrición es la que enfrenta a la patata y la batata. Ambas son populares en la cocina global, ofreciendo texturas y sabores únicos. Sin embargo, surge la pregunta: ¿cuál es la más saludable? Vamos a analizarlo en función de su contenido calórico, vitamínico y mineral.
Menos calorías
Si estás buscando minimizar la ingesta calórica, la patata sale victoriosa. El boniato aporta 115 Kcal por 100 gramos y las patatas de tamaño similar 73 Kcal por 100 gramos. Aunque la diferencia no es abismal, para aquellos que cuentan cada caloría, la patata sería la opción más ligera.
En vitaminas
El escenario cambia al analizar el contenido vitamínico. La batata es una excelente fuente de vitamina A. También proporciona cantidades significativas de vitamina C y E. La patata no se queda atrás, siendo también una buena fuente de vitaminas, pero no puede competir con el potente contenido de la batata.
En minerales
Cuando se trata de minerales, tanto la patata como la batata son parecidas. Ambas aportan una cantidad considerable de potasio, un mineral que ayuda a mantener la presión arterial y la función neuromuscular saludables. La batata tiene ligeramente más contenido de calcio, pero la patata aporta más hierro, magnesio o fósforo.
Entonces, ¿deberías optar por la patata o la batata? En realidad, depende de tus necesidades y objetivos nutricionales. Si estás buscando minimizar la ingesta de calorías, la patata es tu opción. Si quieres aumentar tu ingesta de vitaminas, la batata es la ganadora. En cuanto a minerales, ambas son opciones excelentes. En última instancia, ambas tienen un lugar en una dieta equilibrada. Son versátiles, deliciosas y llenas de nutrientes beneficiosos. Lo importante es disfrutar de estas hortalizas de manera consciente y equilibrada, entendiendo que cada una tiene sus propios méritos y ventajas nutricionales.