En España, un gran número de trabajadores se encuentran fuera del alcance de la prestación contributiva por desempleo debido a que no cumplen con el requisito mínimo de haber cotizado 360 días o más. Para ofrecer un respaldo económico a estas personas, el sistema de protección social dispone del denominado subsidio por cotizaciones insuficientes, una ayuda destinada a quienes han trabajado menos de un año y se encuentran desempleados de forma involuntaria.
Este subsidio, que puede alcanzar un importe máximo de 6.660 euros en el transcurso de un año, representa un soporte fundamental para quienes tienen dificultades para acceder al paro tradicional. Su diseño busca compensar la ausencia de cotizaciones completas, garantizando un vínculo de apoyo durante la búsqueda activa de empleo o formación profesional.
Es esencial comprender que esta ayuda no es universal y conlleva una serie de condiciones restauradas que buscan conjugar solidaridad con la sostenibilidad del sistema.
Requisitos para optar al subsidio por cotizaciones insuficientes
La elegibilidad para esta prestación está supeditada a diversas circunstancias. En primer lugar, el solicitante debe encontrarse en una situación de desempleo total o parcial y haber experimentado un despido o cese involuntario. Esto excluye a quienes abandonaron voluntariamente su empleo, a menos que concurran situaciones específicas contempladas por la ley.
Un requisito crucial es haber cotizado al menos 90 días en los últimos 6 años. En caso contrario, no será posible acceder a esta ayuda. Además, no se debe contar con derecho a la prestación contributiva ordinaria, dado que se trata de un subsidio complementario a ésta.
Otro pilar fundamental es el compromiso del solicitante a subscribir un compromiso activo de búsqueda de empleo o participación en cursos formativos organizados por entidades de empleo, como el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), indispensable para la continuidad del subsidio.
Condiciones económicas y familiares para recibir la ayuda
Los límites de ingresos son un aspecto central. Para optar a este subsidio, los ingresos mensuales no pueden superar el 75 % del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) vigente, lo que equivale a un techo aproximado de 675 euros mensuales en 2025. Este límite busca focalizar la ayuda en personas con rentas bajas.
Cuando en la unidad familiar existen responsabilidades familiares, se realiza una evaluación conjunta de los ingresos. El cálculo se efectúa dividiendo el conjunto de ingresos entre todos los miembros del hogar para asegurarse de que no se exceda el umbral establecido.
Además, el solicitante debe estar inscrito como demandante de empleo y su solicitud debe realizarse en un plazo no mayor a 6 meses desde la finalización de la relación laboral.
Duración y cuantía del subsidio
La duración y el importe de esta prestación varían en función de diferentes factores, principalmente el tiempo cotizado y las cargas familiares.
En cuanto a la temporalidad, para quienes no tienen responsabilidades familiares, la ayuda se concede por:
- 3 meses si se han cotizado 90 días.
- 4 meses con 120 días cotizados.
- 5 meses para un mínimo de 150 días.
- 6 meses si se han cotizado al menos 180 días.
En contraste, si el solicitante acredita la existencia de responsabilidades familiares, la duración puede extenderse hasta un máximo de 21 meses, siempre que se hayan cotizado al menos 180 días y se mantengan los otros requisitos.
Respecto a la cuantía, durante los primeros seis meses se cobra el 95 % del Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (IPREM), que en 2025 se sitúa en torno a 570 euros mensuales. Desde el mes 7 hasta el 12, la ayuda se reduce al 90 % del IPREM, unos 540 euros mensuales, mientras que a partir del día 361 (mes 13 en adelante), la cuantía baja al 80 %, es decir, 480 euros aproximadamente al mes.
Sumados todos estos importes, el monto total que puede percibirse durante el primer año ronda los 6.660 euros, siempre que se mantenga la elegibilidad sin interrupciones.
Cómo realizar la solicitud y documentación necesaria
El proceso para solicitar este subsidio puede realizarse mediante varias vías. Los interesados pueden presentar su solicitud a través de la sede electrónica del SEPE, en las oficinas físicas de este organismo o solicitando una cita previa para ser atendidos.
La tramitación requiere aportar documentación fundamental, entre la que se incluyen:
- Certificado o documento que acredite el cese involuntario en el empleo.
- Certificados de empresa que acrediten los periodos de cotización.
- Declaración de rentas, tanto personales como de la unidad familiar si procede.
- DNI o NIE del solicitante.
Una vez presentada la solicitud, el SEPE evaluará el cumplimiento de los requisitos y notificará la resolución en el plazo establecido.