Síguenos F Y T I T R
Hoy es noticiaEs noticia:

Qué significa que tu perro mueva la cola cuando te ve, según la psicología

Cuando nuestras mascotas agitan su rabo al vernos, nos comunican mucho más de lo que imaginamos

Imagen de recurso de un perro | Foto: Foto de Ludovic Delot

| Palma |

El movimiento de cola en los perros es uno de los comportamientos más estudiados en la psicología canina moderna. Cuando nuestras mascotas agitan su rabo al vernos, nos comunican mucho más de lo que imaginamos sobre sus emociones y estado mental. Según los especialistas, este gesto tan característico puede interpretarse de diversas maneras dependiendo de factores como la intensidad, la dirección del movimiento y, sobre todo, el contexto en el que se produce la interacción. Los etólogos caninos destacan que no todos los movimientos de cola significan alegría, como comúnmente se cree.

Los expertos en comportamiento animal llevan décadas investigando este fenómeno y han llegado a conclusiones reveladoras. Según un estudio publicado por la Universidad Complutense de Madrid, el 87% de los propietarios malinterpretan al menos un comportamiento habitual de sus perros, siendo el movimiento de cola uno de los más malentendidos. El investigador principal, el doctor Miguel Sánchez, señala que «es fundamental analizar la postura corporal completa del animal y no solo centrarse en si mueve la cola o no». Esta visión integral permite comprender mejor las verdaderas intenciones y sentimientos de nuestros compañeros caninos.

La conexión emocional entre humanos y perros se ha consolidado a lo largo de más de 30.000 años de domesticación, creando un vínculo único en el reino animal. Los perros han desarrollado mecanismos de comunicación específicos para interactuar con los humanos, siendo el movimiento de cola uno de los más sofisticados y versátiles. Comprender estos matices resulta esencial para fortalecer la relación con nuestras mascotas y garantizar su bienestar emocional. Cuando un perro mueve la cola rápidamente de lado a lado al vernos, generalmente expresa felicidad y entusiasmo.

Este movimiento amplio y enérgico suele ir acompañado de otros gestos como saltos, acercamientos o incluso ladridos de emoción. Desde la perspectiva psicológica, el animal está manifestando su afecto y alegría por nuestro encuentro, asociando nuestra presencia con experiencias positivas. Es la expresión más clara de que nuestro perro nos reconoce como parte importante de su 'manada'. Por otro lado, un movimiento más lento y controlado indica un estado relajado, aunque no necesariamente excitado. En este caso, el perro se siente cómodo y seguro en nuestra presencia, pero no experimenta una emoción intensa.

Según la veterinaria Ana Martínez, especialista en comportamiento animal, «este tipo de movimiento es habitual en perros equilibrados que tienen un vínculo sano con sus propietarios, sin dependencia emocional excesiva». Existe también un movimiento lateral rápido, con la cola formando un amplio arco, que los expertos identifican como la máxima expresión de alegría en los cánidos. Este comportamiento es especialmente visible cuando el perro reencuentra a su dueño después de una ausencia prolongada. La intensidad de este movimiento está directamente relacionada con el nivel de afecto y la fortaleza del vínculo, según confirman diversos estudios etológicos realizados durante la última década.

Señales de alerta e

No todos los movimientos de cola indican emociones positivas. Cuando un perro mueve la cola manteniéndola baja o entre las patas traseras, está comunicando nerviosismo o sumisión. Este gesto debe interpretarse como una señal de que el animal no se siente completamente seguro o cómodo en la situación, aunque no necesariamente tenga miedo extremo. Los especialistas recomiendan en estos casos dar espacio al perro y no forzar interacciones que puedan incrementar su ansiedad. Un movimiento rígido o tenso, especialmente con la cola elevada o muy recta, puede indicar ansiedad o desconfianza.

Este tipo de movimiento suele observarse en situaciones que generan incertidumbre en el perro, cuando está en alerta o evaluando cómo debe reaccionar. «Es crucial prestar atención a este tipo de señales para prevenir posibles problemas de comportamiento o incluso mordeduras defensivas», advierte el adiestrador profesional Carlos Rodríguez, con más de 15 años de experiencia en modificación de conducta canina. Algunos perros realizan movimientos circulares con la cola cuando están especialmente contentos. Este gesto, menos común pero muy expresivo, denota un nivel elevado de aprecio y conexión emocional.

Generalmente se observa en razas particularmente afectuosas o en perros que han desarrollado un vínculo muy estrecho con sus propietarios. Los estudios más recientes sugieren que este comportamiento tiene sus raíces en patrones ancestrales relacionados con la socialización entre cánidos. Los etólogos coinciden en que el movimiento de cola nunca debe interpretarse de forma aislada. Para comprender correctamente lo que nuestro perro quiere comunicarnos, debemos observar su postura general, la expresión facial, la posición de las orejas y el nivel de tensión muscular.

Un perro que mueve la cola pero mantiene el cuerpo rígido, las orejas hacia atrás y muestra los dientes, no está expresando alegría sino una advertencia. El contexto también juega un papel fundamental en la interpretación. No es lo mismo el movimiento de cola que realiza un perro al recibir a su dueño en casa, que el que exhibe ante un extraño o en un entorno desconocido. La veterinaria etóloga Laura Gómez explica que «los perros ajustan sus señales comunicativas dependiendo del entorno social y ambiental en el que se encuentran, por lo que es esencial considerar todos estos factores para una correcta interpretación».

La creciente investigación en neurociencia canina ha revelado que incluso la dirección del movimiento puede tener significado. Según un estudio publicado en la revista Animal Behaviour en marzo de 2024, los perros tienden a mover la cola más hacia la derecha cuando experimentan emociones positivas y hacia la izquierda ante estímulos negativos, reflejando la lateralización cerebral similar a la de los humanos. La frecuencia e intensidad del movimiento de cola varía significativamente entre razas e individuos.

Algunas razas como los labradores o golden retrievers son conocidas por su expresividad y tienden a mover la cola con mayor frecuencia, mientras que otras como los chow chow o akitas suelen ser más reservados en su comunicación. Estas diferencias tienen una base genética relacionada con la selección artificial realizada por los humanos durante generaciones. La personalidad individual también influye notablemente. Al igual que entre las personas existen introvertidos y extrovertidos, los perros presentan diferentes temperamentos que determinan su estilo comunicativo.

1 comentario

jaume jaume | Hace 4 meses

Me parece de lo mas normal.Lo que seria anormal es que la cola moviese al perro

Relacionado
Lo más visto