La socialista Francina Armengol ha sido elegida este jueves, 17 de agosto, presidenta del Congreso de los Diputados. En concreto, ha obtenido 178 votos, frente a los 139 de la candidata del PP, Cuca Gamarra. Armengol es, por tanto, la tercera autoridad del Estado; la primera es el Rey y la segunda el presidente del Gobierno de España. Es la segunda vez que un mallorquín logra este puesto tan destacado, el primero fue Félix Pons.
Armengol también ha sido presidenta del Govern balear durante dos legislaturas consecutivas, desde 2015 hasta 2023. Sin embargo, perdió las elecciones del pasado 28 de mayo y, posteriormente, el PSOE decidió que fuese candidata de los socialistas al Congreso por Baleares. En un guiño a los partidos independentistas para conseguir su apoyo, el líder socialista, Pedro Sánchez, la propuso para presidir la Cámara baja y este jueves lo ha conseguido con una amplia mayoría.
La carrera política de la inquera ha logrado otro hito muy importante y cabe preguntarse cuánto cobrará por ser la tercera autoridad del Estado. El reglamento del Congreso de los Diputados establece que todos los diputados cobran lo mismo, 3.126,89 euros brutos mensuales. Sin embargo, esta cantidad se va complementando en función de los distintos cargos que se ostentan como miembros designados de la mesa de la Cámara. A Armengol como presidenta le corresponde un complemento de 3.421,04 euros más por ser miembro de la mesa; 3.714,99 euros por gastos de representación; y otros 3.045,96 euros por gastos de libre disposición. En total, se trata de 13.308,88 euros brutos mensuales.
También le corresponde una indemnización de 2.008,61 euros por vivir fuera de Madrid. Además, le pagan los gastos de desplazamiento en avión, tren, coche o barco; así como los de aparcamiento en las estaciones de tren o aeropuertos. También le compensarán los gastos derivados de viajes: 150 euros por día en el extranjero y 120 euros por día en España. También le han entregado un iPad y un teléfono móvil por el hecho de ser diputada electa.
illencaAixò és fals.