El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha promulgado este lunes la ley que le permitirá tener otros dos mandatos en el poder, de tal forma que pueda concurrir tanto a las elecciones de 2024 como a las de 2030, algo que tenía vetado hasta que el mandatario impulsó la última reforma constitucional.
El Parlamento culminó la semana pasada la tramitación de un proyecto a la medida de Putin y que matiza dicha reforma de la Constitución, en la que se establece como principio general un máximo de dos mandatos de seis años cada uno para el jefe de Estado.
El texto avalado por Putin plantea que este límite no se aplique «a la persona que ejerza o haya ejercido el cargo en el momento de la entrada en vigor» de los cambios, lo que afecta al actual presidente, de 68 años, según la agencia de noticias Sputnik.
Putin está dentro de su segundo y 'a priori' último mandato consecutivo, que termina en 2024, tras haber ejercido previamente el cargo entre 2000 y 2008, cuando pasó el testigo a Dimitri Medvedev y él se convirtió en primer ministro. Sin sucesor a la vista, pocos dudan a estas alturas de que quiera seguir en el Kremlin, incluso hasta 2036.
Las modificaciones relativas a la Presidencia se incluyeron dentro de un paquete de cambios que contemplan que los candidatos deben tener al menos 35 años, haber vivido de forma permanente en Rusia durante al menos 25 años y no tener ciudadanía o permiso de residencia en otro país.
Además, las reformas modifican las funciones del Ejecutivo y del poder legislativo y prohíben expresamente la secesión de los territorios que integran Rusia.