Un alto responsable europeo ha respaldado un plan de varios billones de euros, al estilo «Marshall» tras la Segunda Guerra Mundial, para esta vez centrarse en la reconstrucción de Ucrania y prometiendo para ello toda la potencia del brazo crediticio de la Unión Europea (UE) para lo que más bien se antoja como un esfuerzo de rescate global. Werner Hoyer, presidente del Banco Europeo de Inversiones, declaró que no se debe dejar que Europa pague sola la enorme factura que, según predijo, podría ascender a algunos billones de euros.
Según Hoyer el coste de la reconstrucción de Ucrania se había discutido en las recientes reuniones de las Naciones Unidas, el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial en Washington. «¿Cuánto costará la reconstrucción de Ucrania? Las cifras volaban por la sala (...) pero una cosa está muy clara en mi opinión: no estamos hablando de millones, sino de billones».
En el marco del plan estadounidense posterior a la Segunda Guerra Mundial, conocido como Plan Marshall, Estados Unidos concedió a Europa el equivalente actual de unos 200.000 millones de dólares en cuatro años de asistencia económica y técnica. «La comunidad internacional debe proporcionar enormes cantidades de ayuda», dijo. Queda mucho por hacer en Ucrania, donde las autoridades calculan que serán necesarios diez años para limpiar todo el territorio de minas y proyectiles sin explotar.
Recientemente se expuso en público el proyecto para reconstruir Járkov, la segunda mayor ciudad del país de Europa del Este y la más cercana a la línea del frente que marca los combates actualmente. En esta misión se ha comprometido la fundación del afamado arquitecto británico Norman Foster, quien busca reunir a las mentes más brillantes de la arquitectura, la planificación urbanística, el diseño y la ingeniería para levantar una ciudad sostenible y que ofrezca una calidad de vida mejor a sus habitantes.