El jefe del grupo de mercenarios ruso Wagner, Yevgueni Prigozhin, negó que las fuerzas rusas hayan establecido un cerco operativo en torno a la ciudad ucraniana de Bajmut, horas después de que las fuerzas prorrusas aseguraran lo contrario. «El cerco operativo es cuando todas las carreteras y vías de abastecimiento, evacuación y cualquier tránsito están controladas por el fuego enemigo. A día de hoy no tenemos un cerco operativo de Bajmut», afirmó en Telegram. Según Prigozhin, este tipo de informaciones «no se difunden públicamente por motivos operativos». «En cuanto la ciudad sea tomada, lo sabrán sin lugar a dudas» añadió.
Un asesor del líder interino de la región ucraniana de Donetsk impuesto por Rusia, Denís Pushilin, aseguró que las tropas rusas están cerrando el cerco en torno a la ciudad, donde han intensificado la presión sobre las fuerzas ucranianas en las últimas semanas. El asesor y experto «político-militar» de Pushilin, Yan Gagin, señaló en la televisión pública Rossiya-24 que «Artemóvsk (Bajmut en Ucrania) se encuentra en un cerco operativo».
Sostuvo que «ahora hay batallas por el control de la carretera entre Chasiv Yar y Artemóvsk, porque es la única arteria a través de la cual las tropas ucranianas pueden abastecer sus unidades» en Bajmut. Chasiv Yar se encuentra al oeste de Bajmut.
El asesor aseguró que la ruta está bajo el control de fuego de las fuerzas rusas y que las columnas de suministro ucranianas que la siguen ya han sido atacadas. Otro «experto militar» de la vecina región ucraniana de Lugansk, en su mayoría controlada por Rusia, coronel Vitaly Kiselyov, sostuvo en el programa Soloviev Live que las tropas rusas «casi» han rodeado Bajmut desde tres lados.
El teniente coronel retirado del ejército de Lugansk, Andréi Marochko sostuvo por su parte en el Primer Canal de la televisión rusa que «para cerrar el cerco nuestras fuerzas deben avanzar unos 10 kilómetros». La batalla por Bajmut, ciudad poblada antes de la guerra por unas 70.000 personas, ha sido una de las más sangrientas de los once meses de la campaña rusa en Ucrania, ya que su control abriría el camino del Ejército ruso a Sloviansk y Kramatorsk, los principales bastiones ucranianos en el este del país, según Pushilin.