La guerra perpetrada por Rusia en Ucrania está cada vez más atascada en un punto de no retorno, sobre para las fuerzas invasoras, que llevan mucho tiempo sin lograr avances significativos y que incluso temen una contraofensiva ucraniana para esta primavera o verano.
Son varias las pruebas de que Rusia no pasa por buen momento en Ucrania y una de las más recientes es la presencia en la zona de Zaporiyia, una de las más castigadas por el conflicto, de tanques soviéticos de los años 50, es decir, de 70 años de antigüedad.
Este viernes se difundieron imágenes que mostraban un tanque soviético T-55 de la década de 1950 y que según los expertos, no muestra actualizaciones modernas.
Al mismo tiempo, los primeros carros de combate de élite Challenger 2 de Gran Bretaña y Leopard 2 de Alemania están llegando a Ucrania para enfrentarse a los invasores de Vladimir Putin.
Según publica el Daily Mail, los tanques de tecnología y maquinaria obsoletas pueden sumar alrededor de 300, según han sugerido las estimaciones de las antiguas tiendas soviéticas.
Este medio cita a Mick Ryan, general retirado del ejército australiano, que dice que "los rusos, habiendo perdido gran parte de su mejor equipo en el primer año de la guerra, están recurriendo a tanques y vehículos blindados mucho más antiguos extraídos de las tiendas de la Guerra Fría".
Ryan destaca que esto tendrá un gran impacto en el campo de batalla "no solo por la antigüedad y la disparidad tecnológica de los vehículos", sino también porque las tropas rusas sabrán que no pueden competir cuando se enfrenten a una tecnología mucho más moderna".
Las principales deficiencias de estos tanques, citan los analistas, son la falta de telémetros, computadoras balísticas, miras primitivas y estabilización adecuada del arma.