Los residentes de una aldea cercana al lugar del accidente aéreo en el que se cree que murió el jefe mercenario ruso Yevgeny Prigozhin han afirmado que escucharon una explosión y luego vieron al avión precipitarse hacia el suelo. La aeronave, un jet privado Embraer Legacy 600, se estrelló este pasado miércoles cerca de la aldea de Kuzhenkino en la región rusa de Tver en su ruta de Moscú a San Petersburgo y mató a las diez personas a bordo: siete pasajeros y tres miembros de la tripulación.
Por el momento no ha habido reacción oficial por parte del Kremlin ni del Ministerio de Defensa ruso sobre el destino de Prigozhin, a pesar de que un canal de Telegram vinculado a su grupo mercenario Wagner, Zona Gris, lo ha declarado muerto. Un reportero de Reuters en el lugar del accidente a primera hora del jueves vio a individuos llevándose bolsas negras para cadáveres en camillas.
Parte de la cola azul y blanca del avión y otros fragmentos yacían en el suelo cerca de una zona boscosa. Los investigadores forenses habían levantado una tienda de campaña y equipo de iluminación. Partes de los escombros yacían cerca de lo que parecía ser una estructura abandonada a medio construir.
Vitaly Stepenok, de 72 años, residente de Kuzhenkino, recordó lo vivido la tarde anterior. «Escuché una explosión o un estallido. Normalmente, si ocurre una explosión en el suelo, se oye un eco, pero fue sólo un estallido y miré hacia arriba y vi humo blanco». «Una ala voló en una dirección y el fuselaje se quedó así», dijo, señalando con los brazos cómo el avión se dirigía hacia el suelo.
«Y luego se deslizó hacia abajo sobre un ala. No cayó en picado, estaba planeando». De pie en una calle del pueblo, Stepenok afirmó que temía que el avión cayera sobre las casas. «Yo estaba allí. Salté en mi bicicleta y estuve allí (en el sitio) unos 20 minutos. Todo estaba en llamas. La gente caminaba. Sacaron a alguien, sus restos... Yo no pude lograrlo. Vi el número del avión, lo comuniqué y eso fue todo».
Otro vecino, que se identificó como Anatoly, dijo: «En términos de lo que pudo haber sucedido, solo diré esto: no fue un trueno, fue una explosión metálica; digámoslo de esa manera. He oído cosas parecidas antes. Cayó por ahí», dijo señalando hacia una finca.
El accidente ocurrió dos meses después del día en que Prigozhin encabezó un motín fallido contra los altos mandos del ejército ruso, acusándolos de incompetencia en su manejo de la guerra en Ucrania. Los investigadores rusos dijeron que habían abierto una investigación criminal. Algunas fuentes anónimas dijeron a los medios rusos que creían que el avión había sido derribado por uno o más misiles tierra-aire aunque de momento ninguna fuente ha podido confirmar este extremo.