Ucrania se debate entre esperar con los brazos cruzados a la llegada en primavera del primer paquete de ayuda militar de la Unión Europea o cambiar de estrategia para derrotar al enemigo ruso con la ayuda de escuadrillas de drones, reduciendo el alto coste en hombres y armas.
La apuesta por los drones como principal elemento de asalto y la fabricación de armamento y munición en territorio ucraniano es algo en lo que coinciden el presidente, Volodímir Zelenski, y el jefe del Ejército, Valeri Zaluzhni, que tendría los días contados en el puesto, según la prensa estadounidense.
Ambos admiten que la movilización, que incluiría a los hombres en edad militar que abandonaron ilegalmente un país en guerra, es a día de hoy una medida demasiado impopular.
Armamento insuficiente
Zelenski confirmó anoche en su discurso televisado la llegada de dos nuevos sistemas de defensa antiaérea, cruciales para resistir los bombardeos invernales rusos contra la infraestructura energética.
"Estos sistemas son capaces de proteger cualquier cosa. Defenderemos las regiones", dijo después de dos ataques consecutivos contra su ciudad natal, Krivi Rig.
Con todo, admitió que es "insuficiente para el defensa total de Ucrania", para lo que urgió a la Unión Europea a asignar 5.000 millones de euros anuales a la asistencia militar a Kiev en los próximos cuatro años.
Mientras, con el Estado Mayor abordó el incremento de la fabricación de drones y, al respecto, habló de un "plan definido" para la firma de nuevos contratos y el aumento de la financiación tras los mil millones de dólares invertidos en 2023.
Drones ucranianos hacen estragos en Rusia
A falta de los cazas F-16 y de misiles de largo alcance, los drones de fabricación propia ya han demostrado su eficacia en la retaguardia rusa, desde las regiones rusas de Leningrado a Bélgorod o Tula.
Este sábado, un ataque con drones provocó un incendio en una de las mayores refinerías de petróleo de Rusia, informó Andréi Bocharov, gobernador de la región de Volgogrado, en su canal de Telegram.
El fuego llegó a alcanzar 300 metros cuadrados de superficie de la planta, propiedad del gigante Lukoil y el mayor proveedor de productor petrolíferos del sur de Rusia.
A su vez, el jefe de la Inteligencia militar, Kirilo Budánov, reconoció que un dron kamikaze ucraniano Magura V5 fue utilizado para hundir la corbeta misilera 'Ivanovets', un buque guardacostas ruso de casi 60 metros de eslora.
El ataque, que fue confirmado por los blogueros militares rusos, pero no por el Ministerio de Defensa, tuvo lugar el 1 de febrero frente a la costa occidental de la anexionada península de Crimea, en el lago de agua salada Donuzlav, que alberga una base naval.
Zelenski, quien cifró en seis los drones que alcanzaron el 'Ivanovets', condecoró el sábado a los militares que coordinaron la operación.
De esta forma, según estimó el diario alemán Bild, Ucrania ha destruido casi una quinta parte de la Flota rusa del mar Negro —13 barcos, incluido el buque insignia, el 'Moskvá'— desde el inicio de la contienda en febrero de 2022.
Armamento hecho en Ucrania
En un nuevo artículo publicado esta semana, Zaluzhni deja claro que Ucrania no tiene más opción que adoptar una nueva forma de hacer la guerra y recurrir masivamente a los drones, que describió como "casi la única herramienta" para romper la actual guerra posicional que beneficia a Rusia.
Los motivos para la nueva doctrina son claros: ventaja enemiga en efectivos, reducción de la ayuda occidental debido al agotamiento de sus arsenales y la ineficacia de las sanciones contra la industria militar rusa.
El objetivo es crear ese arsenal "relativamente barato, moderno y extremadamente efectivo" en el menor tiempo posible con el fin de infligir el mayor daño posible al enemigo con pocos recursos y menos bajas en las filas del ejército.
Para ello, Zelenski creó una nueva cartera de Industrias Estratégicas, al frente de la cual colocó el pasado año a Oleksandr Kamishin, el hombre que debe hacer realidad la autosuficiencia militar, la llave de la victoria en la guerra, para lo que ya ha firmado acuerdos de cooperación con compañías de defensa occidentales.
Según informa la revista Time, la fabricación masiva de drones ya es un hecho, pero Kiev quiere hacer lo mismo con misiles, tanques y otros equipos militares, para lo que necesita licencias occidentales, a lo que se resiste por el momento Estados Unidos.
"La producción propia de drones, proyectiles y vehículos militares" es capital para "la libertad de los ucranianos y de Ucrania", dijo Zelenski tras reunirse esta semana con el ministro.
Entretanto, Kiev agudiza la imaginación modernizando armamento de la Guerra Fría como los misiles de corto alcance Sidewinder, que ya son utilizados contra los drones Shahed iraníes, según el propio Kamishin.