Shimon Axel Wahnish, el rabino personal del presidente argentino, Javier Milei, tomó posesión este lunes como nuevo embajador de Argentina en Israel, la primera vez que un rabino ocupa el cargo de embajador en el país hebreo.
En un mensaje en su cuenta de X, el ministro de Exteriores israelí, Israel Katz, celebró la toma de posesión de Wahnish, al tiempo que deseó el pronto traslado de la embajada argentina (que actualmente se encuentra en Herzliya, cerca de Tel Aviv) a Jerusalén.
«Gracias a la amistad y el apoyo del presidente Milei, la relación entre Argentina e Israel se estrechará y fortalecerá a nuevas alturas y estoy seguro de que pronto veremos la nueva embajada de Argentina en Jerusalén, la capital eterna del Estado de Israel», escribió el ministro Katz.
El propio Milei ha indicado que pretende trasladar la legación a la ciudad que Israel considera su capital «indivisible», pero que la comunidad internacional reconoce como territorio ocupado tras la toma en 1967 de Jerusalén este, llamada a ser la capital de un futuro Estado palestino.
El mandatario argentino estuvo en Israel a comienzos de febrero y confirmó su intención de nombrar embajador a su rabino personal (el puesto lleva vacante desde 2022) y trasladar la oficina diplomática a Jerusalén.
Milei fue recibido en el aeropuerto por el ministro Katz (algo poco habitual) y su primera parada fue el Muro de las Lamentaciones, el lugar más sagrado para el judaísmo, donde lloró rezando junto a Wahnish, que lo acompañaba.
Milei -quien no es judío pero ha abrazado el judaísmo en los últimos tiempos- también visitó en febrero el kibutz Nir Oz, situado a pocos kilómetros del límite con la Franja de Gaza y objetivo de los ataques de Hamás en octubre, donde vivía una amplia comunidad de argentinos-israelíes.
Cuando Israel se anexionó unilateralmente en 1980 la mitad este de Jerusalén (ocupada desde 1967), la comunidad internacional trasladó sus embajadas a Tel Aviv como protesta, ya que la parte oriental estaba destinada a ser la capital del Estado palestino.
Sin embargo, desde que el expresidente estadounidense Donald Trump trasladara en 2019 la legación de EE.UU. a Jerusalén, países como Honduras, Guatemala o Kosovo han seguido los mismos pasos y otros, como Hungría o Argentina, han expresado su intención de hacerlo.