El dólar estadounidense ha comenzado a recuperarse en las últimas horas frente a las principales divisas internacionales, tan solo un día después de que la Reserva Federal (Fed) ejecutara el esperado recorte de tipos de interés. Sin embargo, lo que ha impulsado realmente a la moneda norteamericana han sido las declaraciones del presidente de la institución, Jerome Powell, quien ha transmitido poca urgencia por reducir aceleradamente los costes de endeudamiento durante los próximos meses.
El repunte del billete verde se ha visto respaldado por los últimos datos económicos positivos publicados en Estados Unidos, que muestran una disminución en las nuevas solicitudes de subsidios por desempleo durante la semana pasada, revirtiendo así el incremento registrado en la semana anterior. Esta señal de fortaleza en el mercado laboral ha supuesto un impulso adicional para la divisa estadounidense.
La tendencia alcista del dólar ha ejercido una notable presión sobre la libra esterlina, borrando las ganancias que había registrado previamente tras la decisión del Banco de Inglaterra de mantener los tipos de interés y ralentizar el ritmo de venta de bonos estatales. Este movimiento refleja la reacción de los mercados ante las diferentes políticas monetarias que están adoptando los principales bancos centrales del mundo.
Durante la rueda de prensa posterior a la decisión de la Reserva Federal estadounidense de reducir los tipos de interés en 25 puntos básicos, Powell calificó esta medida como «un recorte de gestión de riesgos» en respuesta al debilitamiento observado en el mercado laboral norteamericano, pero subrayó que la entidad que preside «no necesita precipitarse en la relajación monetaria».
Según Eric Theoret, estratega de divisas de Scotiabank, las palabras de Powell «se quedaron cortas respecto a la inequívoca moderación que esperaban los mercados». Esta percepción, junto con los favorables datos económicos publicados el jueves y las importantes ventas que había experimentado el dólar a principios de semana, han sido factores determinantes para impulsar la cotización de la moneda norteamericana.
La comunidad de analistas financieros se muestra dividida respecto a la interpretación de los mensajes lanzados por la Fed. Mientras que Goldman Sachs ha señalado que existen varios indicios que apuntarían a que el recorte del miércoles podría ser el primero de una serie de reducciones, los expertos de ANZ han calificado los comentarios del presidente de la Reserva Federal como «nada expansivos», sugiriendo una postura más contenida.
Inmediatamente después del anuncio sobre los tipos de interés del miércoles, el índice dólar tocó su nivel más bajo desde febrero de 2022, situándose en 96,224 puntos. No obstante, durante la jornada del jueves ha experimentado una notable recuperación, ascendiendo un 0,4 % hasta alcanzar los 97,347 puntos. Este índice mide el desempeño del billete verde frente a una cesta compuesta por seis divisas de referencia. La libra esterlina, por su parte, registró inicialmente un avance tras conocerse la decisión adoptada por el Banco de Inglaterra, pero posteriormente cambió de tendencia y cedió un 0,6 % hasta situarse en 1,35515 dólares.
El euro y el yen frente al dólar
La moneda común europea también ha sufrido el empuje del dólar durante la jornada del jueves. El euro ha retrocedido un 0,2 % hasta los 1,17893 dólares, tras haberse replegado el miércoles desde su nivel más alto desde junio de 2021, cuando llegó a cotizar a 1,19185 dólares en una reacción instintiva al anuncio realizado por la Reserva Federal estadounidense. Por lo que respecta al yen japonés, el dólar se ha apreciado un 0,6 % frente a la divisa nipona, situándose en 147,88 yenes.
Los mercados permanecen a la expectativa de la decisión de política monetaria que adoptará el Banco de Japón. La previsión generalizada es que la institución japonesa se abstenga de subir los tipos en esta ocasión. En el entorno actual de política monetaria, con la Reserva Federal iniciando un ciclo de recortes de tipos, la evolución del índice dólar se convierte en un termómetro fundamental para medir cómo interpreta el mercado las decisiones y señales de los bancos centrales. La reciente recuperación tras tocar mínimos de más de dos años sugiere que los inversores están revalorando sus expectativas sobre la velocidad e intensidad del ciclo de relajación monetaria en Estados Unidos.
¿Cómo afecta la fortaleza del dólar a la economía global?
Un dólar fuerte tiene consecuencias significativas para la economía mundial. En primer lugar, encarece las exportaciones estadounidenses y abarata las importaciones, lo que puede ampliar el déficit comercial del país norteamericano. Para las economías emergentes, un dólar más potente supone un mayor coste de su deuda denominada en la divisa estadounidense, incrementando la presión sobre sus finanzas públicas.
Asimismo, las materias primas que cotizan internacionalmente en dólares, como el petróleo, los metales o los productos agrícolas, tienden a experimentar presiones a la baja cuando la moneda norteamericana se fortalece. Esto se debe a que resultan más caras para los compradores que utilizan otras divisas, reduciendo así la demanda global. Para los inversores internacionales, la apreciación del dólar puede proporcionar rendimientos adicionales en sus inversiones denominadas en esta moneda, pero también incrementa el riesgo de volatilidad en los mercados emergentes, ya que suele provocar salidas de capital de estos países hacia activos considerados más seguros, como los bonos del Tesoro estadounidense.
MENOS MAL QUE EUROPA ADOPTO EL EURO, si tuviéramos la PESETA NO TENDRIA CAMBIO o como SOM USBEKO QUE VALE 0,0001 DE EURO.