Tomás, un mestre d'aixa, compró en noviembre de 1964 este Seat 800 de cuatro puertas, un modelo que apenas se fabricó durante tres años y del que salieron sólo unos miles de unidades, dada su complejidad, ya que se trataba de la versión sedán del 600 con 188 milímetros más largo y un motor de 797 cc.
Durante muchos años fue el coche familiar de Tomás y su esposa Bárbara, en el que también aprendieron a conducir sus hijos hasta que la aparición de nuevos modelos lo relegó a un garaje. Fue entonces cuando, en 1998, apareció José Ángel Escalas y lo compró para desempolvarlo y devolverle todo su esplendor y desde entonces sigue circulando por las carreteras de Mallorca. En su día la marca lo introdujo en el mercado para intentar competir con los modelos Citroën 2CV y el Renault 4. En la Isla apenas quedan unas ocho unidades y un par de centenares en toda la Península.
COMPLEJO
El modelo no tuvo mucha salida en el mercado debido a su complejidad de fabricación, ya que era un 600 al que se le cortaba la parte posterior y se le añadían unos centímetros, en una fábrica fuera de la factoría que la marca tenía en la Zona Franca de Barcelona. La producción se inició en enero del 64 y se terminó en junio del 67; se produjeron algo más de 18.000 unidades que salían a un precio de 75.000 pesetas de entonces.