Onofre Alba es un entusiasta de los vehículos clásicos y asegura que desde siempre sintió esta pasión por los coches y las motos antiguos. Lo cierto es que con solo oírlo hablar uno se hace una idea de lo mucho que le gusta este mundillo y las horas que dedica al cuidado y mimo de sus vehículos, aunque reconoce que es un hobby complicado y al que hay que dedicarle mucho tiempo y dinero, más tiempo que dinero, de ahí que terminas siendo un verdadero manitas o de lo contrario tienes que dejarlo al no poder hacer frente a los costes. Por ello es importante poseer conocimientos de mecánica, como tiene Onofre.
Aunque dispone de varios vehículos, en esta ocasión nos muestra su Packard Copupé de 1940, un coche realmente elegante que adquirió en 2012 a través de una subasta en internet llevada a cabo en la ciudad de Houston, en el estado de Texas (EEUU). Nos comenta que aunque ahora son muy habituales las transacciones por internet, hace años no era nada fácil, de hecho todo funcionaba aún vía fax. Afirma que el coche estaba en malas condiciones, aunque eso ya lo sabía él, pero ésta era la única forma de conseguirlo a un buen precio. Por eso la restauración ha sido larga, tanto que ha tardado un par de años en dejarlo como ahora aparece en las fotografías, flamante, digno de lo que era, un coche de gran lujo de los años 40 y que dejaba con la boca abierta a todos al verlo pasar por su diseño y su comodidad, ya que estamos hablando de un coche difícil de conseguir, aunque asegura que en Mallorca se encuentran más de la mitad de todos los que aún circulan hoy en día por las carreteras españolas.
Como hemos comentado al principio, Onofre es un gran entusiasta de los clásicos y explica que durante estos años ha visitado numerosas ciudades de España y de Europa circulando a bordo de estos coches, confirmando que son su gran pasión.
En cuanto al vehículo en cuestión, asegura que a pesar de los años no es difícil encontrar cualquier pieza que se necesite para hacerle una reparación. Claro está que las mencionadas piezas hay que pedirlas a Estados Unidos, lugar de fabricación del coche, aunque hace ya muchos años que no se fabrica, pues hay que recordar que este tipo de automóviles dejaron de fabricarse en 1958, siendo los fundadores de la empresa James Ward Packard, su hermano William Doud Packard, y su socio, George Lewis Weiss, quienes eligieron la ciudad de Warren (Ohio), para fabricarlos.