Kia vuelve a sorprender a propios y extraños con un nuevo modelo, el Niro, el primer vehículo híbrido de la marca, que ha nacido de la nada y que ya veréis, cuando vayamos desglosando el análisis del automóvil, cómo tiene muy pocos puntos flacos –por no decir que casi ninguno–. Eso lo convierte en una gran opción para los que creen en los vehículos híbridos (entre los que me incluyo), que quieren un crossover con mucho espacio, que consuma poco y que tenga un diseño moderno. Casi siempre, esto último se convierte en la primera premisa para los clientes.
Como ya hemos dicho, la marca surcoreana hace una primera incursión en los vehículos híbridos, con vistas a seguir en un futuro. Hay que decir que Kia es uno de los fabricantes que ha crecido más en cuanto a ventas, al mismo tiempo que lo ha hecho en calidad y en diseño.
DISEÑO
Estéticamente el diseño del vehículo es todo un acierto, ya que es como un Sportage pequeñito, en el cual las líneas redondeadas están muy presentes. No tiene tanto este espíritu SUV, pero en líneas generales es muy moderno y atractivo.
Los faros delanteros se caracterizan por estar muy estirados y acabar en el lateral del vehículo, con lo que queda un frontal más limpio. En la parte interior del espóiler delantero se encuentran las luces antiniebla, que tienen un lugar destacado al ser de generosas dimensiones.
La parte posterior también tiene un aspecto parecido al del Sportage, con unas luces redondeadas, con iluminación led, que de noche desprenden una luz muy bonita.
PROPULSOR
El propulsor, uno de los grandes atractivos de este modelo, combina el motor 1.6 GDI con un motor eléctrico, y juntos ofrecen una potencia máxima de 141 CV, que no está nada mal.
El propulsor en sí es tranquilo, pero gracias a la caja de cambios automática con transmisión de doble embrague, pisando el acelerador se pueden conseguir unas prestaciones más que dignas, con la confianza de poder efectuar adelantamientos con seguridad y rapidez. El vehículo elige el funcionamiento más eficiente en cada momento, pudiendo utilizar sólo el motor eléctrico, sólo el de gasolina o los dos a la vez. Puede incluso circular a 120 Km/h sólo con el motor eléctrico, lo cual también es una sorpresa interesante.
Además, el sistema de frenada regenerativa permite que convierta la energía cinética en eléctrica para recargar la batería, lo cual lo hace aun más ahorrador.
Las cifras de la velocidad máxima de 162 Km/h y los 11,5 segundos que tarda para pasar de 0 a 100 Km/h son quizá discretas, pero más que suficientes para viajar de forma ágil por carretera. Todo ello con un consumo de unos 3,8 litros a los 100 Km, un aspecto muy a destacar.
INTERIOR
El interior ha sido, sin duda, otra de las grandes sorpresas que ofrece el modelo surcoreano, al ser un vehículo de los más amplios de su categoría en todos los ámbitos. Tanto el conductor como el acompañante van sentados de forma muy cómoda, sin estrecheces, y los tres posibles pasajeros de las plazas posteriores cuentan con un generoso espacio para las piernas, además de estar sentados a la altura óptima. El maletero, por su parte, también es de grandes dimensiones, lo que acaba de redondear el conjunto.
Los materiales utilizados son de buena calidad y los marcadores son de fácil lectura, además de disponer de una pantalla central donde, aparte de otra información básica, puedes saber en todo momento qué tipo de motor se está usando para circular con el vehículo.