La falta de una red de infraestructura de carga para los coches eléctricos es uno de los mayores problemas a los que se enfrentan este tipo de vehículos y por los que no llegan a arrancar en las ventas. La ausencia de electrolineras o puntos de recarga en aparcamientos es, además, un fenómeno generalizado en toda Europa pese a que haya países en los que al coche eléctrico le corresponde una mayor cuota de mercado.
Por supuesto, este problema se acrecienta conforme el conductor se aleja de la autopista o de las carreteras principales y empieza a transitar caminos más secundarios y alejados de las grandes ciudades. Pero esta tesitura no es nada para la marca alemana Porsche, que ha encontrado una fácil solución: un camión de carga para su modelo eléctrico Taycan.
Durante las últimas semanas, esta marca de alta gama ha estado recorriendo varios países de Europa para que sus clientes pudieran probar la deportividad del Taycan en varios escenarios, como Finlandia o el circuito de velocidad húngaro Hungaroring. En este tipo de contextos ha sido difícil encontrar una red que abasteciera las baterías de todos los deportivos eléctricos de las pruebas, por lo que Porsche decidió crear su propio punto de recarga móvil.
Las especificaciones técnicas de este camión batería hablan por sí solas. Tiene una potencia nominal de 3'2 megavatios, lo que permite cargar hasta una decena de Taycan a máxima velocidad y de manera simultánea. La unidad de almacenamiento tiene una capacidad de 2,1 megavatios hora, lo que significa que puede alimentar las baterías de hasta 30 Taycan en total.
Esta unidad se carga con fuentes renovables. Por ejemplo, durante un evento que tuvo lugar en la ciudad portuguesa de Portimao la energía provino directamente de los sistemas fotovoltaicos cercanos. Los camiones se pueden cargar muy rápidamente y, en condiciones ideales, apenas necesitan cuatro horas para alcanzar el máximo de su capacidad.
Según Ragnar Schulte, Director de Experiencias de Marketing de Porsche, en estos eventos europeos se han completado cerca de 5.000 operaciones de carga e incluso en condiciones extremas (40 grados bajo cero) los camiones han probado su buen funcionamiento y su rendimiento.