El vehículo que tuvimos la posibilidad de probar es el nuevo Suzuki S-Cross, un vehículo que se renovó en su totalidad hace poco más de un año y que nos sorprendió gratamente, aunque la versión anterior ya nos había dado la misma sensación de gran habitabilidad y de conducción fácil y cómoda.
La marca japonesa es sinónimo de gran relación calidad-precio, y en este caso se nota claramente en todos los aspectos; además se le ha dotado de un equipamiento muy completo, tanto en medidas de seguridad activas y pasivas como en «infotainment», sin grandes virguerías pero sí con todo lo necesario para llevar una conducción segura y práctica.
El diseño del S-Cross no se puede catalogar de excesivamente innovador pero sí que destaca por ser mucho más moderno que la versión anterior, con una estética delantera de lo más moderna y con unos faros posteriores que también le lucen bastante.
La verdad es que el interior del S-Cross parece más bien clásico, ya que cuenta con los marcadores clásicos, pero con una pantalla a color en el centro con todo tipo de información interesante para el conductor.
Paralelamente, en la parte más elevada de la consola central lleva una pantalla también de dimensiones considerables con mucha información para el conductor. Además, en la consola central se encuentra el climatizador bizona de muy fácil manejo.
El modelo está disponible en dos motorizaciones posibles, un 1.4 boosterjet mild hybrid de 129 CV y un 1.5L strong hybrid de 105 CV de potencia.
El que hemos probado, el primero de ellos, es el más equilibrado y más interesante, sin duda. Es un propulsor con un motor de combustión interna como propulsor principal turboalimentado que cuenta con el apoyo de un pequeño motor eléctrico de 48 voltios.
Este motor es uno de los grandes aciertos de la marca japonesa, ya que alimenta prácticamente a muchos de los vehículos de la marca, desde el Swift hasta este S-Cross. Es un motor muy eficiente, muy silencioso y que cuenta con una buena aceleración para estar en un vehículo de estas dimensiones.
Las prestaciones de este modelo con este propulsor son de lo más interesantes ya que la velocidad máxima de este vehículo es de 195 Km/h y tarda 9,5 segundos para pasar de 0 a 100 Km/h. Ambas cifras nos indican que tiene un buen rendimiento, que se complementa perfectamente con una media de 5,3 litros, según marca, que no sube demasiado en la conducción diaria.
La conducción de este modelo es de lo más buena, ya que se trata de un SUV con una suspensión muy equilibrada, lo que hace que la conducción en carretera se haga muy fácil. En las curvas no tiende a subvirar en absoluto y se agradecen a todos sus elementos de seguridad activa y pasiva.
El interior del S-Cross cuenta con unos buenos acabados en todos los aspectos. Los plásticos brillan por su ausencia, lo que favorece que en un futuro sea más difícil que se den ruidos molestos.
Una acosa a destacar, sin duda, de este modelo es la habitabilidad, ya que tres adultos pueden viajar en la parte posterior del vehículo de forma cómoda. La capacidad del maletero es también importante, ya que los 430 litros son más que suficientes para llevar bultos de dimensiones considerables.
Resumiendo, se trata de un modelo muy interesante en todos los aspectos y que podéis ver y probar en el concesionario Tecnicars, en Gran Via Asima, 11 del Polígon de Son Castelló.