El científico estadounidense y padre del genoma humano, Craig Venter, aseguró ayer que con la recogida de muestras de distintas formas de vida que iniciará este verano en el mar Mediterráneo espera poder llegar a descubrir hasta 80 millones de nuevos genes.
Craig Venter ha hecho estas declaraciones en el Puerto de Valencia, donde está amarrado su barco "Sorcerer II", que este verano hará un recorrido por el Mediterráneo, pasando por países como Francia, Italia, Turquía o Grecia para recoger muestras y secuenciar su ADN.
"Vamos a tomar muchísimas muestras en las distintas zonas del Mediterráneo para tener distintas formas de vida", ha indicado Venter, quien ha agregado que el objetivo de este proyecto es tratar de conseguir nuevas fuentes de energía limpia o incluso el "combustible del futuro".
Estas "especies únicas" que espera encontrar en el Mediterráneo serán incluidas en una futura "biblioteca de genes del planeta Tierra", según Venter, quien ha explicado que el 95% de todos los genes conocidos en el planeta vienen de lo estudiado en el Sorcerer II, y aunque ya se han descubierto 40 millones de genes confía en encontrar "mucha vida singular" en este mar y duplicar la cifra.
"Cada centímetro cúbico de agua tiene un millón de bacterias, una cantidad ingente de organismos que podemos estudiar", ha afirmado Craig Venter, quien ha agregado que sabemos "muy poco de toda esta vida y dependemos de ella para vivir en este planeta".
Venter ha precisado que la toma de muestras es "una cosa científica y también política", ya que para poder recoger muestras es necesario conseguir un permiso en el Departamento de Estados en Estados Unidos y en cada uno de los países donde vayamos.
El jefe del equipo científico que ha creado en Estados Unidos la primera célula viva sintética ha explicado que esta expedición "no sucede porque sí, siempre tenemos personas que nos están apoyando", como el caso de la Fundación Life Tecnologies, uno de los patrocinadores de este proyecto que inició el pasado año en San Diego.
"Se sabe poco de los microorganismos porque no podemos verlos con los ojos y nuestra meta es descubrir y estudiar toda la vida que hay en el mar", ha dicho a los periodistas Venter, y ha agregado que sin estos microorganismos "no hay vida, nosotros dependemos de ellos".
En el barco filtrarán el agua y los microorganismos obtenidos serán llevado al laboratorio de San Diego para secuenciar el ADN, según ha explicado.
La apuesta del biólogo y su equipo es diseñar nuevos organismos que ayuden a combatir el cambio climático, con nuevas bacterias que puedan eliminar el dióxido de carbono (CO2).