El presidente del PP, Mariano Rajoy, reclamó ayer, en una entrevista concedida a Europa Press, que el Gobierno no cambien el apoyo a los Presupuestos Generales del Estado de 2011 por cesión de nuevas competencias a alguna Comunidad Autónoma. No obstante, se muestra pesimista en relación con estas cuentas públicas porque considera que sólo responden a la necesidad del Ejecutivo de Zapatero de "ir tirando".
Además, el dirigente popular, tras acusar al Gobierno de haber roto el consenso del Pacto de Toledo, reclamó que se haga un planteamiento global en materia de pensiones, al tiempo que defendió un "aumento voluntario" de la edad de jubilación. En opinión de Rajoy, el Gobierno está dando una sensación absoluta de "provisionalidad" y cree que mucha gente que votó en su día al PSOE creen necesario un cambio político en España.
Rajoy se mostró muy pesimista en relación con las próximas cuentas públicas. "No tengo ninguna confianza en los Presupuestos que pueda presentar el presidente del Gobierno", apostilló. En este sentido, recordó que el PP "bien advirtió" al Ejecutivo de que se estaba equivocando y sin embargo, en los últimos tres años hay 2,8 millones de personas más que se han quedado en el paro, según los datos de la EPA.
Ahora, el dirigente popular dijo que no sabe qué presupuestos puede presentar el Ejecutivo porque, añadió, "ni el propio Gobierno lo sabe". Sin embargo, se mostró convencido de que "al final, hará como siempre, una negociación para intentar salvarlos".
En su opinión, las próximas cuentas públicas que presente el Ejecutivo "no responden a nada", tan sólo a "la necesidad del Gobierno de ir tirando, que es como se ha gobernado en los últimos años con los efectos ya conocidos".
En cualquier caso, Mariano Rajoy quiso dejar clara una advertencia y es que "no se cambien los Presupuestos por competencias". "Espero que no se hagan así las cosas y no se actúe con esa irresponsabilidad", apostilló. Si eso ocurre, sería, según dijo, "una gravísima irresponsabilidad". "Me gustaría que los pactos de Presupuestos fueran pactos de Presupuestos y no de otras cosas", remachó.
El dirigente popular también abordó el actual debate que ha lanzado el Gobierno con el planteamiento de elevar la edad de jubilación hasta los 67 años. A este respecto, explicó que él está dispuesto a hablar con el Ejecutivo si éste hace un "planteamiento global" en materia de pensiones.
No obstante, quiso dejar claro que la postura que el PP defiende es un "aumento voluntario" de la edad de jubilación, así como "establecer incentivos" para que la gente pueda "seguir trabajando y cobrando parte de su pensión". "Una persona mayor puede compartir trabajo con un joven e incluso ayudarlo y mientras tanto, cobrar parte de su pensión y seguir cotizando. Eso se puede hacer", aclaró.
Sin embargo, criticó la falta de un "planteamiento global como en todo" y además, considera que la "autoridad moral" del Gobierno para proponer pactos en esta materia "ha quedado muy deteriorada" porque, dijo, "el Gobierno ha roto unilateralmente el Pacto de Toledo". Un pacto, que según recuerda Rajoy, "decía que el sueldo de los pensionistas se revalorizaría según el índice de coste de la vida".
En opinión de Mariano Rajoy, Zapatero "sin pactar" y sin "ni siquiera informar" ha roto el Pacto de Toledo y "ha generado una gran intranquilidad a los pensionistas". En este sentido, el dirigente popular se quejó de "lo difícil" que es pactar con alguien que "ves como incumple los pactos a los que ha llegado". No obstante, insistió en que el PP está "dispuesto a escuchar muy atentamente los planteamientos del Gobierno".
El presidente de los populares se refirió también a los últimos datos de la encuesta del CIS publicados a principios de agosto, que daban la mayor ventaja al PP sobre el PSOE de los últimos seis años. Según Rajoy, "hay mucha gente que está mirando al PP". Se trata, según dijo, de "mucha gente que en su día nos dio su apoyo y su confianza y que volverá a mantenerlo", pero también, añadió, "hay mucha otra gente que votó al PSOE, pero creen que es necesario un cambio político en España".