El pastor Terry Jones, que amenazaba con quemar el Corán el sábado para conmemorar el aniversario de los atentados del 11 de septiembre de 2001, anunció ayer que desiste de esas intenciones.En una comparecencia ante los medios en su iglesia de Gainesville (Florida), Jones anunció su decisión, tomada después de que se multiplicaran las críticas sobre la iniciativa en todo el mundo, encabezadas por las del propio presidente de EE.UU., Barack Obama.El pastor, que habló sin aceptar preguntas de la prensa, indicó que ha renunciado a quemar el Corán porque el imán de la mezquita que se planeaba en la "zona cero" de Nueva York donde se perpetraron los atentados ha aceptado mudar el centro religioso a otro emplazamiento.
Sin embargo, hasta el momento no ha sido posible confirmar que efectivamente el imán neoyorquino ha accedido a construir la mezquita en otro lugar.
Según Jones, volará el próximo sábado a Nueva York para reunirse con el imán.
El cambio de postura del pastor se produce después de una serie de llamamientos internacionales, que incluyeron a Obama y al papa Benedicto XVI.
El secretario de Defensa, Robert Gates, se puso ayer en contacto con Jones para pedirle directamente que renunciara a su amenaza, que el Gobierno de Estados Unidos. consideraba que podría poner en peligro a sus tropas en el exterior y alentar el reclutamiento de extremistas islámicos.La red internacional de Policía Interpol había lanzado una alerta a los 188 países miembros en los que advierte de "fuerte posibilidad" de atentados violentos si se completa la profanación.El Departamento de Estado también emitió una alerta de viaje para los estadounidenses en la que advierte a sus ciudadanos que se mantengan alejados de las posibles protestas que puedan ocurrir en el extranjero contra la quema.
A las advertencias sobre las consecuencias que acarrearía la quema se sumó ayer el propio presidente Obama, que calificó la convocatoria del "Día Internacional de la Quema del Corán" como un "acto destructivo".
El presidente estadounidense, en una entrevista concedida al programa "Good Morning America", de la cadena ABC, consideró que la quema ayudará enormemente a Al Qaeda en el reclutamiento de combatientes y pondrá en mayor peligro a las tropas de EE.UU. en Afganistán e Iraq.
"Espero que escuche la voz de la razón y entienda que se está implicando en un acto destructivo", señaló el presidente Obama.