El lehendakari, Patxi López, destacó ayer la coincidencia con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en su análisis de la situación después del comunicado de ETA en el que anunció un nuevo alto el fuego permanente.
En declaraciones a los periodistas, tras reunirse con Zapatero, López dijo que la reunión, celebrada en La Moncloa, fue "lógica y normal" y en la misma, además del comunicado de ETA también analizó la situación de la economía y del país.
Indicó que "afortunadamente" lo que hubo es una "coincidencia" y una unidad entre todos los partidos democráticos en la respuesta que han dado al último comunicado de ETA en la "exigencia permanente" de que lo único que tiene que hacer es desaparecer.
El lehendakari añadió que es verdad que cada día que pasa sin atentados y sin asesinatos es un día "ganado a la libertad", pero también es verdad, prosiguió, que ETA sigue existiendo y que no ha anunciado ni su fin, ni su desaparición.
Por lo tanto, "todavía queda camino por recorrer y a nosotros lo que nos corresponde es mantener firmeza en la defensa del Estado de derecho, de los principios y valores democráticos, exigencia hacia ese mundo y también prudencia hacia cualquier otra consideración", apostilló.
Preguntado por la incidencia que puede tener el alto el fuego de ETA en el turismo, López dijo que "mucha" y señaló que el récord de visitantes que ha tenido Euskadi en 2010 tiene que ver con sus atractivos, con un sector turístico "absolutamente" profesional, pero también con el clima de tranquilidad que se respira en el País Vasco y "que mucha gente estaba deseando que existiera" para visitarlo.
ECUENTRO CON URKULLU
Zapatero compartió ayer en La Moncloa una cena con el presidente del PNV, Íñigo Urkullu, a la que asistió el vicepresidente primero y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, y en la que también estuvo presente el horizonte que se abre con el comunicado de ETA. Sobre la mesa estuvieron asimismo otros asuntos como la denominada "ley Sinde", sobre las descargas ilegales en internet, y la reforma de las pensiones.
"La memoria de las víctimas perdurará entre nosotros"
El jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, rindió ayer homenaje a las fuerzas de seguridad y se mostró convencido de que, si la sociedad las apoya y permanece unida en defensa de la democracia, "el fin definitivo de la violencia llegará", aunque nunca se extinguirá el recuerdo de sus víctimas. "Llegará el fin de la violencia de ETA, pero la memoria de las víctimas -incluyendo desgraciadamente la del agente Nerin y la de tantos y tantos más- no se extinguirá y perdurará entre nosotros", subrayó en el Palacio de la Moncloa ante los familiares de todos los agentes muertos en 2010 en acto de servicio.
Zapatero garantizó que "si permanecemos unidos como sociedad, con firmeza y determinación, en defensa de nuestra democracia y nuestros valores, apoyando a las fuerzas y cuerpos de seguridad en el buen trabajo que hacen, el fin definitivo de la violencia llegará".