El PP anunció ayer la presentación, esta semana, de una querella contra la Junta de Andalucía por el "monumental" fraude de los ERE y por entender que los responsables de la Junta pueden estar involucrados en delitos de malversación de caudales públicos, cohecho, tráfico de influencias y prevaricación.
En rueda de prensa, en la sede del PP, el vicesecretario de Comunicación del PP, Esteban González Pons, y el secretario general del PP andaluz, Antonio Sanz, coincidieron en que se está ante un "auténtico tsunami" político que se llevará por delante a altos dirigentes de la Junta y del partido, y que este fraude se ha convertido en una "auténtica tela de araña" de corrupción socialista.
El vicesecretario de Comunicación Esteban González Pons recordó que el PP ha pedido reiteradamente la dimisión del vicepresidente primero y entonces presidente andaluz, Manuel Chaves; y del actual presidente de la Junta y entonces consejero de Economía, José Antonio Griñán, y ésta no se ha producido.
A juicio de Pons, "tal y como van las cosas y conforme avanza la investigación, a no mucho tardar Griñán y Chaves tendrán que dimitir pero no porque lo pida el PP, sino por el curso de la propia investigación".
Según informó el secretario del PP andaluz, la querella se dirigirá en concreto, contra el exdirector de Trabajo y Seguridad Social de la consejería de Empleo, Francisco Javier Guerrero; contra el exdirector de Trabajo y Seguridad Social Juan Márquez; el exdirector provincial Antonio Rivas y Juan Lanzas, intermediario de los ERE.
Sanz informó de que en un solo mes se han triplicado el número de fraudes en los ERE pasando de 37 a primeros de febrero a los 146 contabilizados hoy día y, además, el 50 por ciento de los expedientes tramitados tienen "vicio de fraude" y son presuntamente irregulares.
A juicio de Sanz, "la magnitud del escándalo alcanza a toda la Junta" aunque de "manera directa" afecta a los "tres exconsejeros" José Antonio Viera y Antonio Fernández y al también exconsejero y actual presidente autonómico José Antonio Griñán", a quien además ha acusado de ser el creador del fondo de reptiles.
Sanz consideró inaceptable que se haya hecho "negocio" con el dinero de los parados y que, además, ese dinero haya ido a manos de los brokers.
Además aseguró que la trama afecta a la totalidad de las competencias de la consejería de Empleo de la Junta y ha dicho que todas estas competencias están "viciadas y manchadas de corrupción". "Todas las patas de las consejería están manchadas de corrupción" subrayó Sanz, quien insistió en que el PP llegará hasta el final.
Por su parte, González Pons insistió en "la telaraña de corrupción" que tiene "el color" del Partido Socialista y aseguró que esta no es una práctica andaluza sino del PSOE, porque lo andaluz es otra cosa infinitamente más prestigiada.