El presidente de EE.UU., Barack Obama, utilizó ayer su discurso en la Asamblea General de la ONU para insistir en que el reconocimiento del Estado Palestino debe llegar sólo mediante conversaciones directas con Israel, sin "atajos".
En su discurso anual, en el que repasó los drásticos cambios en favor de la democracia habidos este año en Oriente Medio y países como Costa de Marfil y el nuevo Sudán del Sur, el presidente estadounidense destacó que "no hay atajos para llegar al final de un conflicto que se ha prolongado décadas", el israelo-palestino.
La alocución de Obama se vio forzada en parte por las circunstancias. La decisión del presidente de la Autoridad nacional Palestina, Mahmud Abás, de aprovechar su discurso ante la Asamblea General el viernes para reclamar el reconocimiento de su Estado en el Consejo de Seguridad de la ONU, pese a la firme oposición de EE.UU., se ha convertido en la gran protagonista del cónclave mundial.
Su decidido apoyo a los movimientos de liberación en el mundo árabe ha colocado al mandatario estadounidense en una aparente contradicción, dada su amenaza de vetar las pretensiones palestinas si el asunto llega al Consejo de Seguridad.
Obama intentó explicar la lógica de su postura en su discurso, al indicar que "la paz no vendrá de resoluciones y declaraciones en la ONU", sino de las negociaciones directas entre israelíes y palestinos.
"Al final, son los israelíes y los palestinos -no nosotros- los que deben llegar a un acuerdo en los asuntos que les dividen: las fronteras y la seguridad, los refugiados y Jerusalén", agregó el presidente.
Estados Unidos, reiteró, apoya el establecimiento de un Estado palestino, "una visión retrasada durante demasiado tiempo", pero el éxito sólo llegará "si podemos instar a las partes a sentarse juntas, a escucharse y entender las esperanzas y miedos mutuos".
Las dos partes, indicó, tienen "aspiraciones legítimas". Si los palestinos reclaman su Estado, Israel exige seguridad.
Miles de palestinos se manifestaron ayer en las principales ciudades de Cisjordania para pedir que la ONU les reconozca como su Estado miembro número 194 coincidiendo con el inicio de los debates de la Asamblea General de la organización internacional.