Miembros de la CUP de Terrassa (Barcelona) y la concejal del partido en el municipio, Maria Sirvent, rompieron fotos del Rey en el pleno municipal celebrado el miércoles, en solidaridad con los cinco encausados por quemar imágenes del monarca.
La acción tuvo lugar mientras se debatía la moción de la formación antisistema para que el ayuntamiento se posicionara sobre el tema, tras la que Sirvent cargó contra el Gobierno y la Generalitat por la respuesta de «represión» ante estos hechos, según ha informado este jueves en un comunicado.
La propuesta de la CUP se aprobó considerando estos actos como «simbólicos», por lo que consideran que no deberían ser un delito, y se expresó la solidaridad con los encausados, aunque no tuvo el mismo respaldo la propuesta de no reconocer los tribunales españoles y pedir la dimisión del conseller catalán del Interior, Jordi Jané.