La vicepresidenta de la comisión de investigación del Congreso sobre la supuesta financiación ilegal del PP, la 'popular' Beatriz Escudero, ha abandonado este martes este órgano tras llamar «imbécil» al portavoz adjunto de ERC, Gabriel Rufián, quien previamente le había reprochado que actuara como «palmera» de Francisco Álvarez Cascos.
El enfrentamiento entre ambos se ha producido durante el interrogatorio de Rufián al que fuera secretario general del PP y ministro de José María Aznar.
Álvarez-Cascos ha aprovechado su debate con el diputado independentista para denunciar la existencia de un «sistema de apartheid» en Cataluña. «Le falta la bandera del pollo», le ha replicado Rufián, en alusión a la bandera de España durante la dictadura franquista.
La bandera de pollo
El comentario ha molestado a Escudero, que estaba sentada a la izquierda de Cascos: «Ha faltado al respeto a la bandera de todos los españoles», le ha soltado desde la Mesa de la comisión sin que el presidente de la misma, Pedro Quevedo, le hubiera dado la palabra.
«¿No sabe lo que es? ¿Tengo que tener respeto a la bandera del pollo?», le ha preguntado Rufián a Escudero, antes de pedirle que «se corte un poco», comentario que ha llevado de nuevo a Quevedo a intervenir para intentar centrar el debate.
Mientras Escudero protestaba desde su puesto en la Mesa, Rufián le ha llamado «palmera». «Me acaba de llamar palmera», se ha quejado la diputada antes de soltar al diputado de ERC: «No me guiñes el ojo, imbécil».
Actitudes sexistas
«Ya está bien, ¿dónde están las actitudes sexistas y el apoyo de unas mujeres a otras?», le ha preguntado después a la portavoz de Podemos Noelia Vera.
A continuación, tras pedir «amparo» al presidente de la comisión, Escudero se ha levantado y ha salido de la sala acompañada de tres de sus compañeros: Carlos Rojas, Francisco Molinero y Eloy Suárez. Dentro se ha quedado Óscar Clavell, que actúa como portavoz en la comparecencia de Cascos.
En declaraciones a los medios, Escudero ha vuelto a quejarse del comportamiento de Rufián y también de Quevedo: «Se pone a guiñarme el ojo, aquí no hay actitudes sexistas ni nada, le pido amparo al presidente y me dice que no, pues ya está bien de aguantar», ha explicado visiblemente enfadada.
Y también ha arremetido de nuevo contra las «señoras diputadas» que había en la sala y que, a su juicio, no la han defendido de lo que considera una actitud machista de Rufián porque es del PP. «Se insulta a la bandera, a una parlamentaria, a una mujer y nos quedamos tan tranquilos porque esto forma parte de la juerga del señor Rufián, siempre actúa así pues hay que aguantarle. Pues no, hay actitudes que son intolerables», ha sentenciado Escudero.
Pedirá amparo a Pastor
La diputada ha dicho sentir «haber abandonado la Presidencia de la comisión» y haber «dejado solo» a Álvarez-Cascos y ha anunciado su intención de pedir amparo de forma inmediata a la presidenta del Congreso, Ana Pastor.
Después, una vez que Rufián ha concluido su interrogatorio, Escudero ha vuelto a ocupar su sitio en la Mesa, lo que ha propiciado que el diputado de ERC volviera a referirse al incidente para señalar que seguro que si hubiera sido él quien hubiese llamado imbécil a otro diputado habría sido «expulsado» mientras que «probablemente» la diputada del PP iba a poder continuar toda la sesión «tomando café» dentro de la sala.
Quevedo ha vuelto a intervenir para recalcar que para los canarios ser «palmero» no es nada malo, sino haber nacido en la isla de La Palma. «Les pido no liarla más», ha rogado, antes de sugerir a Rufián que retirara lo de «palmera», a lo que el diputado de Esquerra ha accedido.
Por su parte, el 'popular' Óscar Clavell ha acusado de Rufián de ir a la comisión sólo para «montar un 'show' y un circo» y ha mostrado el apoyo de todo el Grupo Popular a Escudero. «Parece que ser mujer y del PP es delito y pecado en este país. Todo nuestro apoyo a todas las mujeres y todas las personas que representan dignamente las ideas del PP», ha abundado.