El presidente del Tribunal Supremo (TS) y del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Carlos Lesmes, ha denunciado nuevamente la situación del CGPJ, que debía haberse renovado hace casi tres años, calificándola de «insostenible» e instando a las fuerza políticas a que dejen este asunto fuera de la «lucha partidista» y lleguen a un a acuerdo en «las próximas semanas».
«La situación en la que nos encontramos resulta insostenible para la judicatura y para la propia sociedad, porque este incumplimiento de la legalidad, postergando la renovación del Consejo, está afectando de manera directa a un órgano que fue diseñado por la propia Constitución para garantizar la independencia en el ejercicio de la función judicial», ha dicho durante la apertura del año judicial.
Por ello, ha subrayado que «urge» que el órgano de gobierno de los jueces «desaparezca del escenario de la lucha partidista y que las fuerzas políticas concernidas, con patriotismo constitucional y generosidad, alcancen en las próximas semanas el acuerdo necesario para la renovación».
Reprocha a Sánchez que llegase a hablar de revancha para justificar los indultos
Lesmes ha criticado sin llegar a citarlo que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, llegase a justificar los indultos a los independentistas condenados en el 'procés' indicado que la «revancha» no está entre los valores constitucionales.
Lesmes, durante el discurso inaugural del año judicial, ha lamentado que «la labor de los jueces y su independencia se ponen en ocasiones en entredicho --especialmente desde algunas instancias políticas-- cuando las decisiones judiciales se contraponen a sus designios, dificultan sus estrategias o, simplemente, no son de su agrado».
Ha puesto de ejemplo los indultos del 'procés', señalando que «se ha llegado a contraponer, para explicar la indulgencia, la concordia frente al resentimiento, como si la acción de la Justicia al aplicar la ley a la que todos nos debemos fuese un obstáculo para la convivencia u obedeciera a razones distintas de las previstas en las normas».
«Nada más alejado de la realidad. La función de los jueces y magistrados, juzgando y haciendo ejecutar lo juzgado, con independencia absoluta de influencias externas o internas, políticas o de cualquier otra índole, no se corresponde en modo alguno con la idea de revancha o con el sentimiento de rencor, pues juzgar es dar a cada uno lo suyo de acuerdo con las leyes», ha dicho.
En este sentido, ha reivindicado que «la justicia no es, ni ha sido nunca, un obstáculo para la paz, sino el instrumento fundamental para salvaguardar el orden jurídico y, por ende, la convivencia pacífica entre los ciudadanos». «Por ello, es mi deber reivindicar hoy, una vez más, la labor de los jueces españoles, y muy especialmente del Tribunal Supremo», ha subrayado.