El líder del PP, Pablo Casado, ha lamentado que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se haya vuelto a «parapetar» tras las comunidades autónomas para no asumir su responsabilidad en la lucha contra la pandemia, cuando según la OMS y las normas estatales la competencia es suya «desde el principio de la pandemia». Sánchez ha pronunciado este domingo una declaración institucional en la que ha anunciado que se reunirá con los presidentes autonómicos el próximo miércoles para estudiar «nuevas medidas compartidas» ante el avance de la pandemia.
Casado ha recordado, durante su intervención en el XIV Congreso Autonómico del PP, que el Partido Popular ha tendido la mano a Sánchez desde el principio de la crisis sanitaria para aprobar una ley de pandemias, a la que Sánchez sigue negándose, ha lamentado. En esta sexta ola, y con 120.000 fallecidos, el Gobierno de España solo ofrece volver a reunirse con los presidentes autonómicos «para ver qué le cuentan y él, desearles suerte», ha lamentado Casado.
«Todas las autonomías ha tenido que afrontar sin apoyo del Gobierno de España la lucha contra el virus», ha insistido el presidente del PP, quien ha criticado la «grandilocuente convocatoria» de Sánchez que, «como siempre, ha sido de mucho ruido y pocas nueces». Una ley de pandemias estatal es lo que se necesitaría, según Casado, quien ha recordado que esta norma la han pedido el Consejo de Estado, los presidentes autonómicos, los alcaldes, los jueces, Europa y los sanitarios.
En una línea similar se ha pronunciado uno de los que acudirán al encuentro de los mandatarios autonómicos, el gallego Alberto Núñez Feijóo. Tras escuchar las palabras de Sánchez el presidente de la Xunta ha reclamado este domingo que «entre hoy y mañana» se convoque a los responsables autonómicos de sanidad para trabajar un documento y que la reunión de presidentes tenga «algún interés», porque si es para «otra foto más será una ocasión perdida».
Núñez Feijóo se ha expresado en estos términos ante un grupo de periodistas tras una sesión solemne en el Parlamento de Galicia, que este domingo cumple cuarenta años. El presidente gallego se ha declarado «partidario» de hablar las cosas «con seriedad» para intentar lograr «acuerdos sólidos» y no solamente para «hacer comentarios o fotos de la reunión».